MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) –
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha confirmado este martes que las negociaciones indirectas con Israel para un acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza a cambio de la liberación de rehenes secuestrados el 7 de octubre de 2023 y presos palestinos en cárceles israelíes está “en sus etapas finales”, en medio de los avances obtenidos durante los últimos días.
El grupo islamista ha indicado en un comunicado que ha mantenido “una serie de contactos y consultas” con altos cargos de otras facciones palestinas para comunicarles los “progresos” obtenidos en las negociaciones en la capital de Qatar, Doha, según ha recogido el diario palestino ‘Filastin’, vinculado a Hamás.
“Durante estos contactos, los líderes de fuerzas y facciones expresaron su satisfacción con el rumbo de las negociaciones y subrayaron la necesidad de preparativos nacionales para la siguiente etapa y sus requisitos”, ha especificado, al tiempo que ha recalcado que las consultas “continúan” de cara a “finalizar un acuerdo de alto el fuego y un intercambio de prisioneros”.
Hamás ha apuntado además que la cúpula del grupo islamista y los representantes de otras facciones palestinas “han expresado su deseo de que esta ronda de negociaciones concluya con un acuerdo claro y exhaustivo”, después de que Israel lanzara una ofensiva contra el enclave tras los citados ataques de octubre de 2023.
Posteriormente, las autoridades de Gaza, controladas por Hamás, han publicado un comunicado advirtiendo de “la traicionera ocupación israelí” en medio de “las conversaciones sobre la posibilidad de que se declare un alto el fuego” en el enclave palestino.
“Ante las crecientes conversaciones sobre la posibilidad de que se declare un alto el fuego entre la ocupación israelí y la resistencia palestina, queremos emitir una firme advertencia al gran pueblo palestino en toda la Franja por el peligro de las traiciones de la ocupación israelí”, ha señalado la oficina de prensa de las autoridades gazatíes.
Así, ha hecho hincapié en un comunicado en su cuenta en Telegram en que el Ejército israelí “mantiene una postura premeditada para causar más masacres, crímenes y daños a civiles inocentes en varias zonas”, antes de agregar que “experiencias pasadas confirman que la ocupación no duda en cometer masacres y crímenes, incluso durante conversaciones sobre un alto el fuego”.
Las autoridades de Gaza han advertido de que Israel aprovecha esas situaciones “para causar el mayor número de daños y pérdidas”, por lo que ha reclamado “cautela” a la población “en esta etapa sensible”, incluidas precauciones en sus desplazamientos, dado que “la ocupación podría tender emboscadas o haber colocado bombas en propiedades”.
“Tengan cuidado con las viviendas bombardeadas y demolidas”, ha señalado, al tiempo que ha solicitado igualmente cautela con los explosivos no activados y “mantenerse alejados de lugares que puedan ser objetivo de la ocupación israelí o lugares con un movimiento inusual”.
Los comunicados han sido publicados después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, señalara el lunes que está “a punto” de lograrse un acuerdo entre Israel y Hamás. “En la guerra entre Israel y Hamás estamos a punto de (lograr) que la propuesta que planteé hace meses finalmente dé su fruto”, argumentó.
En esta línea, el presidente electo estadounidense, Donald Trump, afirmó horas después que un acuerdo entre las partes “está muy cerca”. Los enviados especiales para Oriente Próximo de Biden, Brett McGurk, y de Trump, Steve Witkoff, se encuentran de visita en la región de Oriente Próximo y mantienen contactos con los principales actores con vistas a lograr un acuerdo.
Los citados ataques del 7 de octubre de 2023 dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 250 secuestrados, según el Gobierno de Israel. Las autoridades gazatíes, controladas por Hamás, han denunciado hasta la fecha más de 46.600 muertos, a los que se suman más de 800 palestinos muertos en Cisjordania y Jerusalén Este a manos de las fuerzas israelíes o en ataques por parte de colonos.