MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) –
El empresa propietaria del carguero ‘Solong’, que el lunes se estrelló contra un petrolero por causas desconocidas frente a las costas de Reino Unido, en aguas del mar del Norte, ha descartado que sus contenedores transportasen cianuro de sodio, una sustancia altamente tóxica en contacto con el agua y que se temía pudiese provocar un desastre natural a gran escala.
La firma alemana Ernst Russ ha salido al paso en un comunicado de las “desinformaciones” para explicar que el barco, de bandera portuguesa, tenía a bordo “cuatro contenedores vacíos que previamente habían transportado” cianuro de sodio y que “seguirán vigilados”.
El secretario de Estado responsable del tráfico marítimo, Mike Kane, ha aclarado ante la Cámara de los Comunes que no se han detectado señales de una posible contaminación a gran escala y ha confirmado que el incendio en el ‘Solong’ aún persiste.
La empresa ha agradecido la labor de los servicios de emergencia y ha aprovechado también para ofrecer su ayuda a los afectados y especialmente a la familia del tripulante que sigue desaparecido, a la que ha ofrecido “todo el apoyo posible”, informa Sky News.
Kane ha indicado que las autoridades asumen ya a estas alturas que esta persona desaparecida ha fallecido.
INVESTIGACIONES EN MARCHA
La empresa propietaria se ha ofrecido a colaborar “plenamente” con las investigaciones en marcha, sin que ninguna de las partes implicadas haya sido capaz de determinar por ahora qué pudo ocurrir.
Un tripulante del barco estadounidense que sufrió el impacto, el ‘Stena Immaculate’, ha asegurado en declaraciones a la cadena CBS News que el ‘Solong’ “apareció de la nada” y no se detuvo en un primer momento tras el impacto. Pudo ser evacuado junto a otros compañeros en un proceso que duró alrededor de media hora.
Por su parte, un portavoz de Downing Street sí ha querido alejar la hipótesis de que se trate de un acto intencional. “No parece que haya ningún indicio de acto delictivo por el momento”, ha señalado.
El incidente ha tenido lugar frente a las costas de Reino Unido pero la Oficina de Investigación de Accidentes Marinos del Gobierno británico ha matizado por boca de un portavoz que “aún hay que decidir” qué país tomará las riendas de las investigaciones, toda vez que éstas recaen habitualmente en los países de bandera –en este caso Portugal o Estados Unidos–.
Un portavoz ha confirmado a la BBC contactos con estos dos países y ha resaltado que Reino Unido es el primer interesado en saber qué pudo ocurrir porque el siniestro tuvo lugar en sus aguas territoriales.
