El fiscal general condena el ataque “porque denota que no existen garantías de investigación en Colombia”
MADRID, 14 Sep. (EUROPA PRESS) –
Un helicóptero del Ejército de Colombia ha sido atacado este miércoles en la región colombiana de Córdoba, cuando trasladaba a una comisión de la Procuraduría y la Fiscalía que viajaba para investigar un posible caso de intimidaciones y amenazas de militares a la población rural.
Las autoridades han indicado que se ha tratado de disparos que han apuntado al depósito de gasolina, sin que se hayan producido daños ni víctimas. Tras el incidente, el helicóptero ha tenido que desviarse y ha realizado un aterrizaje de emergencia en Carepa, Antioquia, informa la emisora colombiana Caracol.
El fiscal general, Francisco Barbosa, ha condenado el ataque porque, considera, “denota que no existen garantías de investigación en Colombia, que el Ejército no da garantías de seguridad a la Justicia colombiana, a la Fiscalía General de la Nación”.
Barbosa ha señalado que se ha puesto en contacto con la procuradora para dirigirse al presidente, Gustavo Petro, para “manifestarle esa preocupación de que miembros no solamente de la Procuraduría, sino de la Fiscalía, como rama judicial del poder público, no pueden cumplir adecuadamente sus funciones en el territorio nacional”.
Este incidente ha tenido lugar después de que el Ejército abriera una investigación ante un posible caso de amenazas e intimidaciones por parte de militares contra población civil en la zona rural de El Manso, al tiempo que ha denunciado los hechos y ha incidido en que este comportamiento “no representa los principios y valores enseñados en las escuelas de formación”, donde se insiste en el “respeto absoluto por los Derechos Humanos”.
Tras ello, Petro ha indicado que “el mismo Ejército (es) quien debe presentar públicamente, al lado del Gobierno, su propia investigación de los hechos”: “Volver al paramilitarismo y al despojo de tierras sería el peor error militar de la fuerza pública. Esto no puede pasar en este Gobierno”, ha zanjado el mandatario.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, ha advertido de que estos hechos son “de suma gravedad” y requieren medidas “drásticas”. “Ninguna tolerancia con comportamientos que no solo afectan a las comunidades, sino a las propias Fuerzas Militares”, ha dicho.
En respuesta, el presidente del partido Comunes, el exguerillero Rodrigo Londoño, ha lamentado de que “la doctrina militar del enemigo interno sigue enraizada en el corazón de las Fuerzas Militares, llevando a soldados a actuar contra la población civil”.