Huánuco. Watson Soto es un joven barista, que a sus 17 años decidió convertirse en uno de los mejores en su región. Hijo de productores y productor también de café, conoció la chacra cuando tenía 13 años.
Su familia se inició en la caficultura en el 2013, cuando se erradicó el cultivo de la hoja de coca en su distrito y vieron en el café una oportunidad de desarrollo y una alternativa que traería calma en el hogar.
Ese año, junto a su padre iniciaron a sembrar café en la finca y por eso aprendió de los procesos que se requieren para obtener un grano de calidad. “Yo vi como se almacigaba el café, ayudaba a plantar, a fumigar y también estaba en la cosecha”, nos relata con cierta nostalgia.
Para Watson, el trabajo en la finca requiere de mucho sacrificio, así como el proceso que atraviesan los granos para llegar a una taza. En el 2018, la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) junto al proyecto Alianza Café, impulsaron capacitaciones a hijos de productores en el distrito de Monzón, provincia de Huamalíes, región Huánuco, a través del barismo.
De la finca al barismo
Watson y su familia son nacidos en el valle del Monzón, una localidad que fue duramente golpeada por el narcotráfico y que hoy se va posicionando en la producción de café de especialidad. Por eso, cuando Watson escuchó de los talleres sobre barismo, tema que conocía muy bien, debido al interés de conseguir granos de mejor calidad en su finca, no dudo en inscribirse.
Este joven barista y productor había comprendido que el esfuerzo no solo estaba la finca, sino también en el tostado y la preparación del café. Watson relata brevemente que su padre preparaba el café artesanalmente. “Mi padre…tostaba el café bien negro, en una sartén y eso para nosotros era el mejor café, pero estábamos equivocados”, comenta.
Cuando participó en el taller, Watson Soto tenía 17 años. Todo lo que vio, de quien sería su maestro en este nuevo camino, Hitoshi Domínguez, lo sorprendió. “El barista llegó con sus métodos que yo desconocía. La prensa francesa, la moka italiana, el V60, el sifón japones y otros métodos más, y nosotros soprendidos porque cuando los ves son bonitos, pero no conocíamos su uso”, señala.
Durante las clases, Watson aprendió a identificar los defectos del café, la importancia del tostado, los perfiles, la molienda, la preparación de café en métodos de extracción, la temperatura y el tipo de agua.
“Ver todos esos temas… te gustan, hacen que quieras aprender más, … el maestro también trajo una máquina espresso, donde nos enseñaron a extraer espressos, lo que viene a ser la esencia del café”, comparte con nosotros, un Watson apasionado y orgulloso de todo su aprendizaje.
Las competencias
Luego de ampliar su panorama con el café, su vinculo con esta bebida se extendió. “Me apasioné bastante por este mundo… ya que mis padres son productores y nuestro café es bueno, … porque no ser un barista, prepararme y representar a nuestro valle, a nuestro distrito”, muy confiado, Watson confiesa que luego de ese curso, él continuó capacitándose.
Al notar su habilidad, el maestro de Watson lo llevó a competir a la provincia de Satipo, como barista destacado, y aunque no obtuvo los primeros lugares, esa experiencia lo motivó a continuar. Hitoshi Dominguez, su maestro, lo llevó a su cafetería en la ciudad de Huancayo, para que se siga perfeccionando su técnica.
En Lima, Watson conoció a Giovanna Villegas, fundadora de la Asociación de Baristas del Perú, quien resaltó su desempeño en la preparación de café, y así surgió una amistad, que lo apoyó durante su aprendizaje en la capital del Perú
Su pasión y orgulllo no se ha detenido. Además de seguir trabajando en la finca, en el 2023, ganó el primer puesto en una competencia de Latte Art de su región, quedando en primer lugar. Para Watson, la catación también es un factor importante en el sector y por ello sigue participando en eventos que lo ayudan a mejorar en ese aspecto.
Watson Soto quiere ser un campeón. Él espera seguir representando al valle del Monzón, a través de campeonatos y concursos, que le permitan demostrar el buen café que produce su distrito. Este año, la Feria Internacional de Cafés Especiales se realizará en su región y, desde ya, viene preparándose para participar en las actividades programadas.