Por: Manuel Boluarte – Inforegión
La última evaluación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) sobre el Acuerdo de París concluye que los nuevos compromisos climáticos han logrado reducir solo ligeramente las peligromesas proyecciones de calentamiento global, situando al mundo en una grave escalada de riesgos y daños climáticos.
El “Informe sobre la Brecha de Emisiones 2025 del PNUMA: Fuera de Objetivo” señala que las proyecciones de calentamiento global para este siglo, basadas en la plena implementación de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC), se sitúan ahora entre 2.3° y 2.5°, una leve disminución respecto al rango de 2.6° a 2.8° del informe anterior.
A pesar de este ajuste, el PNUMA advierte que los países están lejos de cumplir el objetivo de limitar el calentamiento a muy por debajo de los 2° C, y mucho menos de los 1.5° C.

Fracaso en el tercer intento y la amenaza del sobrecalentamiento
La falta de ambición y de acción implica que el promedio multidecenal de la temperatura global superará los 1.5° C, lo que será difícil de revertir. La directora ejecutiva del PNUMA, Inger Andersen, fue categórica: “Los países han tenido tres intentos para cumplir las promesas del Acuerdo de París, y en cada ocasión no lo han logrado”.
La brecha de implementación sigue siendo crítica: solo 60 Partes del Acuerdo de París presentaron nuevas NDC con objetivos de mitigación para 2035 antes del 30 de septiembre de 2025. Estas 60 Partes representan el 63% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
• Emisiones crecientes: Las emisiones continúan en aumento, creciendo un 2.3% interanual hasta alcanzar las 57.7 gigatoneladas de CO 2 equivalente en 2024.
• Brecha de reducción: Las emisiones en 2030 tendrían que reducirse un 25% con respecto a los niveles de 2019 para las trayectorias de 2° C, y un 40% para las de 1.5° C, con solo cinco años para lograr este objetivo.
• Efecto anulado: El impacto real de las nuevas NDC es mínimo. Las actualizaciones metodológicas sólo explican 0.1° C de la mejora, y la próxima retirada de Estados Unidos del Acuerdo de París anulará otro 0.1° C.
El informe reitera que el sobrecalentamiento podría ocurrir muy probablemente en la próxima década. La tarea es lograr que este exceso sea temporal y mínimo, mediante reducciones rápidas que permitan regresar al objetivo de 1.5° C para 2100.
El rol crítico del G20 y las soluciones existentes

El G20 (excluyendo a la Unión Africana) es fundamental en la solución, ya que sus miembros representan el 77% de las emisiones globales. Sin embargo, la mayoría de sus compromisos no son lo suficientemente ambiciosos, y sus emisiones aumentaron un 0.7°en 2024.
El PNUMA insiste en que, aunque la situación es compleja, la acción aún es posible, especialmente con las soluciones probadas ya disponibles.
• Tecnología desplegada: Se dispone de las tecnologías bajas en carbono necesarias, como el rápido desarrollo de la energía eólica y solar.
• Imperativo geopolítico: Lograr reducciones más rápidas requiere sortear un entorno geopolítico complejo, y un aumento sustancial del apoyo y la reestructuración del marco financiero internacional para los países en desarrollo.
El PNUMA concluye que cada fracción de grado evitada reduce la escalada de los daños, las pérdidas y los impactos en la salud, y disminuye el riesgo de puntos de inflexión climáticos e impactos irreversibles.