PERÚ. En las últimas semanas, se han reportado incendios forestales en las regiones Apurímac, Cusco, Arequipa, Pasco, Junín y Amazonas. En Apurímac, específicamente en el distrito Ihuayllo, en la provincia Aymaraes, donde se registró uno de los incendios más devastadores, cinco personas fallecieron a causa de las llamas, mientras que otras 11 sufrieron heridas de gravedad. Asimismo, en esta región, ocurrieron dos incendios forestales adicionales: uno en el sector Hualalachi, distrito Talavera; y otro en el sector Huaccoto, distrito Huancarama, ambos en la provincia Andahuaylas.
En Cusco, el último martes se reportó un incendio en la comunidad Collpani, ubicada en la zona de amortiguamiento del parque arqueológico de Machu Picchu. Luego de tres días de esfuerzos para extinguir el fuego, la responsable de la actividad de prevención y control de incendios forestales en el Santuario Histórico de Machu Picchu, Jessica Morón Álvarez, informó a un medio de comunicación que el siniestro ya había sido controlado.
No obstante, hasta la mañana de este viernes, persistían dos focos que permanecían bajo observación. Según la funcionaria, alrededor de 120 hectáreas fueron consumidas y se perdió una gran cantidad de flora y fauna. Es el tercer incendio en lo que va del año en esta zona de amortiguamiento.
Calentamiento global acentúa el riesgo de incendios forestale
Los incendios forestales en la zona andina peruana no son inusuales y se suelen asociar a ciertas prácticas agrícolas, como la quema del suelo para preparar los terrenos antes de la siembra. Sin embargo, fenómenos climatológicos, como El Niño, que ha provocado escasez de lluvias en varias regiones del país, intensifican estos incidentes.
El economista y exviceministro de Gestión Ambiental del Ministerio del Ambiente (Minam) José De Echave explicó a Inforegión que, en ocasiones, el uso del fuego para realizar esta quema de cultivos se sale de control y “se producen los incendios”. Esto es aun peor “cuando las temperaturas están más altas de lo normal y ha habido sequía”.
«Hay una época del año en la que los incendios se reproducen por estas prácticas agrícolas. Justamente, estamos en ese periodo. Durante agosto y setiembre comienza el calendario agrícola en Perú, previo a la temporada de lluvias. En estos meses, se da inicio a lo que se conoce como ‘la campaña grande’. Cada año, un gran número de los incendios forestales reportados entre agosto y setiembre ocurren debido a las quemas con fines agrícolas», indicó.
De Echave precisó que la particularidad actual está conectada con el calentamiento global y el cambio climático, que conlleva al incremento de la temperatura de los suelos. Esta situación se agrava por el periodo de sequía que viene atravesando el país.
«La combinación de temperaturas altas y la ausencia de lluvias generan un escenario más peligroso, dado que ocasionan la deshidratación de las plantas y sus químicos, convirtiéndolas en combustible altamente inflamable. Como consecuencia, los incendios forestales se siguen multiplicando, con impactos cada vez más devastadores«, señaló.
Olas de calor se mantienen
Cabe destacar que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) emitió nuevamente una alerta en relación a otra ola de calor que impacta en las regiones amazónicas y que, en esta ocasión, se extiende a Ayacucho, Cusco y Puno. Además, informó sobre el incremento de temperatura diurna en la sierra, hasta el domingo 28. Apurímac es una de las localidades perjudicadas por esta situación.
Caretas en alianza con INFOREGIÓN.