Alerta: Herbicida glifosato sigue poniendo en riesgo la salud humana

Caretas en alianza con INFOREGIÓN | Estado peruano no atiende pedidos para que sea retirado del mercado o se restringa más su uso, afirmó Luis Gomero, presidente del Consorcio Agroecológico Peruano

El herbicida glifosato sigue contaminando los ecosistemas y poniendo en riesgo la salud humana. A pesar de ello el Estado peruano desoye los estudios que sustentan la existencia de estos impactos. Así se pronunció Luis Gomero, presidente del Consorcio Agroecológico Peruano, al alertar acerca de los peligros que comprende seguir usando dicho producto.

Desde la masificación mundial del uso de este herbicida se empezaron a mostrar evidencias de su impacto a la biodiversidad y la salud humana. “En el 2015 la Organización Mundial de la Salud lo catalogó como un potencial cancerígeno. Desde entonces se ha empezado a cuestionar su uso a nivel internacional. Cada vez hay más evidencias de los daños a nuestras chacras y a actividades biológicas en el manejo de las unidades productivas”, sostuvo.

El glifosato y su alcance en el país

Gomero precisó que este producto fue desarrollado por la transnacional Monsanto para matar malezas en infraestructuras como carreteras, aeropuertos y canales de riego. Después se extendió su uso con fines estrictamente agrícolas para controlar las malezas en los campos. Se trata de un herbicida de amplio espectro, es decir, su capacidad mortífera es elevada.

Su uso se ha elevado de modo significativa en el Perú. “Antes estaba concentrado en zonas tropicales. Ahora se usa en la costa, en la sierra, como parte del manejo de las actividades agronómicas. Incluso, se extendió su uso para inducir a la maduración de la caña de azúcar, que ya fue prohibido”, afirmó. Cómo estará de extendido su uso que, entre los productos más solicitados por las empresas dedicadas a su comercialización, este es el segundo producto más demandado.

Riesgos para los ecosistemas y la salud humana

En cuanto al riesgo que conlleva a los ecosistemas, el glifosato es un herbicida de amplio espectro, o sea, mata todo. “Eso significa que cuando se aplica a las unidades productivas va afectar a toda la biodiversidad de flora que se tiene, especialmente en condiciones tropicales y en la zona andina. Es una real amenaza”, alertó Gomero.

Otro riesgo es que afecta a la microbiología del suelo. Allí “viven microorganismos benéficos que ayudan a mejorar la fertilidad natural del suelo, a descomponer la materia orgánica, al crecimiento de las plantas. Todo esto recibe el impacto del herbicida”, refirió. A lo anterior se añaden efectos directos a la fauna. “No olvidemos que estamos aplicando un veneno que va contaminar los cursos de agua. (Esto) va afectar a los recursos hidrobiológicos que viven en los ríos, lagunas, etc.”, advirtió.

En cuanto al impacto del herbicida en la salud humana citó los informes de la Organización Mundial de la Salud. Estos sustentan que “este herbicida fue clasificado como un potencial cancerígeno. Hay muchos estudios que han concluido que definitivamente puede contribuir a ese proceso.

Además, hay estudios hechos a nivel de laboratorio que han encontrado que puede formar tumores”, subrayó.

Estado peruano no se involucra en el tema

Desde “el Consorcio Agroecológico Peruano y la Red de Acción en Agricultura Alternativa, desde hace más de 15 años, planteamos la necesidad de que este producto sea retirado del mercado o sea sometido a una serie de restricciones de uso por los impactos que ocasiona”, manifestó Gomero.
Recordó que en años recientes se descubrió la presencia de residuos de este producto en los envíos de café y cacao. El hecho inquietó a los mercados extranjeros. “Por ello se pidió al Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) para que actúe y empiece a regular el uso indiscriminado que se da al glifosato”.

Lamentablemente, el Senasa no escuchó este llamado.
También se pidió a la Dirección General de Asuntos Ambientales del Ministerio de Salud para que vea el tema. “Opinaron que el glifosato era inofensivo y que podía seguir usándose”, lamentó. A modo de explicación, Gomero ensaya una respuesta. Considera que la empresa que es dueña de esta molécula tiene mucha influencia para que esta siga en el mercado.

Como reflexión final, Gomero instó a cuidar mejor al ambiente y nuestra salud. “Es tiempo de hacer una agricultura mucho más amigable con nuestros ecosistemas. Necesitamos producir alimentos sanos y seguros. Necesitamos cuidar nuestra biodiversidad que es nuestro capital natural para poder mantener nuestras futuras generaciones”, acotó.