Un reportaje del programa periodìstico Punto Final, revelò que un día antes del colapso del techo en el centro comercial Real Plaza Trujillo, que dejó seis muertos y más de 80 heridos, trabajadores del lugar reportaron extraños ruidos provenientes de la estructura, según un testigo presencial. El hombre, que prefirió mantener su identidad en reserva, reveló que los empleados del patio de comidas le informaron que la estructura hacía ruidos desde la mañana del 20 de febrero, y que un grupo de técnicos intervino para soldar las partes afectadas.
El testigo sugirió que, a pesar de las señales de peligro, el centro comercial no cerró sus puertas para realizar una revisión más exhaustiva, lo que pudo haber prevenido la tragedia. “Sabían que algo estaba mal, pero no tomaron la decisión de cerrar temporalmente el lugar para evitar cualquier riesgo”, indicó el testigo, quien cuestionó la falta de acción inmediata para garantizar la seguridad de los usuarios.
Los empleados del centro comercial corroboraron la versión del testigo, asegurando que se habían detectado problemas estructurales en el techo del patio de comidas. Este hecho ha generado gran indignación, ya que se considera que la tragedia podría haberse evitado si se hubiera tomado una acción preventiva. La situación ha puesto en evidencia la posible negligencia por parte de los responsables del centro comercial.
Mientras tanto, las investigaciones siguen su curso y las autoridades buscan esclarecer las causas del colapso. Las víctimas, algunas en estado grave, continúan recibiendo atención médica, mientras que el centro comercial enfrenta un creciente escrutinio por su falta de medidas preventivas ante los fallos en la infraestructura.