El Gobierno peruano expresó este lunes su saludo oficial a María Corina Machado, luego de que la líder opositora venezolana recibiera el Premio Nobel de la Paz 2025, una distinción que reconoce su defensa de la democracia, los derechos humanos y la recuperación institucional en Venezuela. El mensaje fue difundido por la Presidencia del Perú y complementado por un pronunciamiento de la Cancillería, en un gesto diplomático alineado con la posición regional sobre la transición política en ese país.
La comunicación llega en un momento clave para América Latina, donde varios gobiernos observan de cerca la instalación del presidente electo Edmundo González Urrutia, reconocido como el ganador legítimo de las últimas elecciones venezolanas. En ese marco, Perú reafirmó su respaldo a una transición democrática ordenada, en línea con su política exterior.
Un reconocimiento a la defensa democrática en Venezuela
El mensaje difundido desde Palacio de Gobierno subrayó que la labor de María Corina Machado ha sido determinante para el proceso democrático en Venezuela. “Su ejemplo inspira los valores de libertad, diálogo y justicia que compartimos”, expresó la Presidencia en la publicación oficial.
El pronunciamiento incluyó una misiva firmada por el presidente José Jerí Oré, en la que resalta la “incansable labor” de Machado en favor de la libertad y la recuperación institucional de su país. El documento también destaca su rol como promotora de una alternativa política en medio de la prolongada crisis venezolana, marcada por denuncias internacionales de violaciones a los derechos humanos y restricción de libertades civiles.
¿Por qué es relevante para el Perú este reconocimiento internacional?
Porque refuerza la postura de la política exterior peruana respecto al respeto del Estado de derecho, la defensa de la democracia regional y la estabilidad sudamericana, en un contexto donde Venezuela continúa en un proceso de definición política.
Posición de la Cancillería: respaldo a una transición ordenada
El Ministerio de Relaciones Exteriores también difundió un mensaje oficial saludando la decisión del Comité Nobel. En su declaración, la Cancillería aseguró que el compromiso de María Corina Machado con los derechos humanos “es un aporte fundamental para nuestra región”, especialmente en un contexto en que varios países siguen exigiendo el respeto a los resultados electorales en Venezuela.
El comunicado reitera que el Perú respalda plenamente la instalación del presidente electo Edmundo González, conforme a la voluntad expresada por el pueblo venezolano. Este posicionamiento coincide con los pronunciamientos emitidos por otros gobiernos latinoamericanos y organismos multilaterales que piden una transición política sin interferencias.
¿Qué implica la postura peruana en términos diplomáticos?
Supone mantener la línea de apoyo al proceso democrático venezolano, reforzar la coordinación con aliados regionales e insistir en el respeto a los resultados electorales y las garantías institucionales.
Un Nobel con efectos políticos en Sudamérica
La distinción a María Corina Machado ocurre en un momento en el que Venezuela se encuentra en plena redefinición institucional, luego de un ciclo político marcado por tensiones internas, sanciones internacionales y cuestionamientos a la legitimidad de sus autoridades.
Para el Perú, este nuevo contexto coincide con una etapa de reposicionamiento diplomático bajo el gobierno de José Jerí, que ha puesto énfasis en fortalecer la defensa de la democracia en la región. La felicitación a Machado no solo se enmarca en ese enfoque, sino que también envía una señal a la comunidad internacional sobre la alineación del Perú con los estándares democráticos regionales.
¿Generará este reconocimiento un impacto en la relación bilateral Perú–Venezuela?
Si bien no se anticipan cambios abruptos, la distinción y los pronunciamientos oficiales podrían reforzar los canales de diálogo con sectores democráticos venezolanos y contribuir al seguimiento internacional del proceso de transición.
Reacciones y lectura regional del anuncio
Aunque la felicitación se centró en el mérito personal de María Corina Machado, el contexto político venezolano hace que la noticia tenga una dimensión mayor. En distintos países latinoamericanos, figuras políticas y organizaciones de derechos humanos han destacado que este Nobel simboliza la lucha de la sociedad civil venezolana por recuperar sus instituciones.
La mención del presidente Jerí sobre “libertad, diálogo y justicia” resume la línea discursiva del Gobierno peruano, que en los últimos meses ha reiterado su posición a favor de la gobernabilidad democrática en la región. Asimismo, la Cancillería ha insistido en que el Estado de derecho debe prevalecer por encima de las tensiones políticas internas de cada país.
El reconocimiento a Machado, por tanto, funciona también como un respaldo a los esfuerzos internacionales para acompañar la transición venezolana sin vulnerar su soberanía. La postura peruana se suma a este consenso.