La congresista Milagros Jáuregui ha causado gran controversia en el Congreso de la República luego de sus declaraciones comparando a las personas LGBT con animales. En un reciente discurso sobre los “valores tradicionales”, la legisladora de Renovación Popular aseguró que las relaciones homosexuales son impulsadas por la “lujuria” y la “perversidad”, y que las personas del mismo sexo no controlan sus deseos. Estas declaraciones han sido rechazadas por diversos sectores de la sociedad y han generado una ola de críticas.
Durante su intervención, Jáuregui se refirió a la ideología de género como una amenaza que busca imponer una identidad sexual por encima del sexo biológico. La congresista también defendió la “unión natural” entre un hombre y una mujer, destacando su labor junto a su esposo para promover lo que ella considera una estructura familiar tradicional, en oposición a lo que califica de “agenda ideológica”.
Las palabras de Jáuregui provocaron una pronta respuesta política. La congresista Susel Paredes, de la bancada Juntos por el Perú, presentó una denuncia constitucional contra su colega por infringir la Constitución y por el delito de discriminación. Paredes consideró que los comentarios de Jáuregui fomentan el odio y la intolerancia, un comportamiento que, a su juicio, no debe ser tolerado, especialmente cuando proviene de una figura pública.
Esta controversia ha encendido un debate en la opinión pública, donde activistas y organizaciones en defensa de los derechos LGBT han expresado su rechazo a las declaraciones de Jáuregui. La denuncia presentada ante el Congreso plantea un nuevo desafío en la discusión sobre la libertad de expresión y los límites del discurso en la política.