A través de sus redes sociales, la parlamentaria, Maricarmen Alva Prieto, se pronunció sobre la posible decisión de destituir al actual directorio de Petroperú para reinstalar a funcionarios previamente cuestionados.
“Es preocupante que el gobierno pretenda remover al directorio de Petroperú para reinstalar a funcionarios cuestionados. Hay miles de millones de dólares en pérdidas para los peruanos. Es momento de evaluar la responsabilidad política de estas malas decisiones”.
La expresidenta del Congreso, precisó que “han trascendido nombres de personas que ya han estado a cargo de la dirección y gerencia de Petroperú. No podemos continuar con más de lo mismo que ha fracasado estrepitosamente. Petroperú debe dejar de ser un barril sin fondo para el tesoro público”.
Alva Prieto indicó que la gestión del directorio liderado por Oliver Stark ha sido clara en cuanto a la posibilidad de seguir rescatando financieramente a la empresa.
“Petroperú tiene dos caminos: reestructurarse, que parece ser lo más apropiado, o seguir en el mismo sendero de inyectar dinero con las consecuencias que ello acarrea”, agregó.
La congresista por Acción Popular también puso en evidencia la agudización de la crisis financiera durante el gobierno de Pedro Castillo, aunque matizó que “esto se viene arrastrando desde gobiernos anteriores, como el de Ollanta Humala, que intentó modernizar la empresa y hacerla sostenible, pero con resultados fallidos”.
Alva Prieto, sobre la cuestionada inversión en la refinería de Talara manifestó que, “invertir nuevamente es perpetuar un círculo vicioso. La hemorragia de dinero fiscal no se detiene, y no llegamos a nada concreto. Debemos apostar por una gestión liderada por expertos, sin interferencias políticas. Es crucial involucrar al sector privado, nacional o internacional, sin comprometer el control estatal de la empresa”.
Al ser interrogada sobre el costo final de la refinería de Talara, la congresista expresó su inquietud por la falta de claridad en las cifras. “Me preocupa que el gobierno quiera retroceder en los avances logrados. No podemos repetir los errores cometidos por Pedro Castillo, motivados por demagogia e ideología,” afirmó.
En relación al exorbitante pasivo de Petroperú, que al cierre de junio ascendía a 8,470 millones de dólares, Alva cuestionó: “Ese dinero pudo haberse destinado a cubrir la demanda hospitalaria en el Perú o a mejorar la infraestructura educativa en el país. Esta situación no puede continuar. Hay responsabilidades políticas y de gestión que deben ser asumidas.”
Finalmente, sobre la posibilidad de declarar en quiebra a Petroperú, Alva concluyó: “Eso sería la peor consecuencia. Si existe una posibilidad real de reestructuración, debemos optar por ella. Este proceso debe ser liderado por expertos y realizado de manera transparente, asegurando que la verdad salga a la luz”, concluyó.