Erick Moreno Hernández, alias ‘El Monstruo’, es considerado actualmente el criminal más peligroso y buscado del Perú. Con una recompensa de S/ 500.000 sobre su cabeza, lidera una red delictiva que ha extendido el terror en distintos distritos de Lima Norte a través de extorsión, sicariato y secuestros. A pesar de numerosos operativos policiales, continúa operando desde la clandestinidad, burlando a las autoridades y sembrando impunidad.
La banda que lidera, ‘Los Injertos del Cono Norte’, ha impuesto su ley en zonas como Comas, San Martín de Porres y Los Olivos. Comerciantes, transportistas y pequeños empresarios viven bajo amenaza constante: si no pagan los cupos exigidos, son víctimas de atentados, agresiones o asesinatos. El objetivo es claro: controlar el territorio mediante el miedo.
La notoriedad de ‘El Monstruo’ se disparó tras el secuestro de una menor en diciembre de 2023, aunque sus crímenes son anteriores. Un operativo fallido en marzo de 2020, que costó la vida a un suboficial de la PNP, ya evidenciaba su peligrosidad. En 2024, la revelación de que dos policías filtraban información a su organización expuso la corrupción que facilitó su prolongada fuga.
El 16 de abril, un operativo conjunto de la Policía Nacional del Perú y la élite policial brasileña en Suzano, São Paulo, buscaba capturar a un líder criminal. Aunque ‘El Monstruo’ escapó, la operación avanzó significativamente en su rastreo y resultó en la muerte de dos miembros de su organización.
El presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, confirmó que se contaba con información precisa de inteligencia sobre su paradero. “La persecución contra ‘El Monstruo’ continúa y será incesante. Confiamos en que el largo brazo de la ley pronto lo alcanzará y será traído al Perú para purgar condena por los gravísimos delitos que ha cometido”, sostuvo.
Adrianzén también destacó que la ejecución del operativo en Brasil fue manejada con absoluta discreción para evitar filtraciones que pudieran poner en riesgo el despliegue. Las autoridades peruanas mantienen contacto permanente con sus pares brasileños para continuar con la operación y capturarlo lo antes posible.
Entretanto, ‘El Monstruo’ opera en la sombra, burlando a la PNP y desafiando al Estado a través de videos y mensajes virales. Su prolongada fuga lo convierte en un símbolo de impunidad y evidencia la incapacidad del sistema para desmantelar las redes de corrupción y violencia que encarna.