Youna reaccionó con dureza a la solicitud de Samahara Lobatón por S/30 000 para la pensión de su hija, rechazando la petición con una frase que se viralizó: “Soy un barbero, no un futbolista.” Desde Estados Unidos, explicó que sus ingresos no le permiten cubrir ese monto, y propuso alternativas educativas más accesibles.
La tensión escaló cuando Youna divulgó conversaciones privadas. En los chats compartidos, Samahara lo tildó de “pu* cab*” y cuestionó su rol como padre con mensajes como “ni como papá sirves”. También reveló una frase dirigida a su hija: “Abraza muy fuerte a tu papá porque nunca más lo verás”, lo que él calificó como maltrato psicológico.
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Además de estas declaraciones, Youna aseguró estar recibiendo amenazas cada vez que pasa tiempo con su hija en EE.UU., situación que, según él, afecta la estabilidad emocional de la menor.
Por su parte, Samahara también ha respondido. Asegura que no hubo acuerdo para que su hija se quede con Youna, y lo acusa de haber intentado ampliar el tiempo de convivencia sin previo aviso o coordinación.
