El Instituto Confucio es un proyecto mundial del Ministerio de Educación de la República Popular China. Se inició en el año 2004 y actualmente difunde la lengua y la cultura china alrededor del mundo, en casi 550 institutos y 1200 aulas Confucio. Los institutos se establecen en asociación con universidades locales, que es el caso de la Universidad Ricardo Palma (URP) en el Perú. Cecilia Tello, directora del Instituto Confucio, responde sobre los puntos clave.
–¿Por qué hoy es más importante que nunca aprender chino mandarín en el Perú?
Aprender chino mandarín es crucial en el Perú debido al creciente impacto de China en la economía global y regional. China es uno de los principales socios comerciales del Perú, lo que crea numerosas oportunidades en comercio, inversiones y cooperación tecnológica. Hablar mandarín no solo mejora las posibilidades de empleo y negocios, sino que también facilita un entendimiento más profundo de la cultura y los valores chinos, esenciales para establecer relaciones exitosas en un mundo cada vez más globalizado.
–El Instituto Confucio funciona en la URP desde 2010. ¿Cómo ha renovado desde entonces su vinculación con su contraparte, la Universidad de Hebei?
Desde su establecimiento, el Instituto Confucio en la URP ha fortalecido su relación con la Universidad de Hebei mediante intercambios académicos y culturales. Estos incluyen programas de intercambio de estudiantes y profesores, la coorganización de conferencias y seminarios, y el desarrollo conjunto de proyectos de investigación. Esta colaboración ha enriquecido la oferta educativa y ha proporcionado oportunidades para que los estudiantes experimenten inmersión cultural directa en China, mejorando así la comprensión del idioma y la cultura china.
–¿Cuáles son los principales programas ofrecidos y el perfil de su alumnado?
El Instituto Confucio ofrece programas que abarcan desde cursos básicos de idioma hasta niveles avanzados, preparación para exámenes de competencia como el HSK, y talleres de caligrafía y cultura china. Su alumnado es diverso, incluyendo estudiantes universitarios, profesionales del sector empresarial y educativo, y personas interesadas en la cultura china. Este amplio perfil refleja el interés en el idioma tanto por motivos profesionales como personales. Cabe señalar que el Instituto Confucio de la URP apoya la Carrera de Traducción e Interpretación chino-español de vital importancia debido a:
1. Relaciones comerciales y económicas: China es uno de los principales socios comerciales de Perú. La habilidad de comunicar eficazmente entre estos dos idiomas es crucial para facilitar transacciones comerciales, negociaciones y acuerdos. Los traductores e intérpretes juegan un papel importante en cerrar la brecha lingüística y cultural que puede existir entre las empresas chinas y peruanas.
2. Creciente interés cultural y educativo: con un aumento en el interés por la cultura y la educación china, especialmente a través de instituciones como el Instituto Confucio, hay una mayor demanda de expertos que puedan traducir no solo el idioma, sino también las sutilezas culturales que vienen con él.
3. Globalización y competitividad: en un mundo globalizado, el dominio de varios idiomas es una ventaja competitiva significativa. La formación en traducción chino-español permite a los profesionales peruanos acceder a un mercado laboral más amplio y diversificado, tanto en el ámbito local como internacional.
4. Intercambio cultural y diplomático: además de los beneficios económicos y educativos, la capacidad de traducir entre chino y español facilita el intercambio cultural y diplomático. Los traductores actúan como puentes entre las culturas, fomentando un entendimiento mutuo y relaciones diplomáticas más sólidas.
En resumen, la carrera de traducción chino-español en la Universidad Ricardo Palma no solo responde a las necesidades actuales del mercado peruano, sino que también prepara a los estudiantes para ser actores clave en las relaciones bilaterales e internacionales.
–¿Cómo orientan actualmente la agenda cultural?
La agenda cultural del Instituto Confucio está orientada a promover un intercambio cultural rico y vibrante entre China y Perú. Esta orientación se refleja en las siguientes actividades:
1. Eventos culturales: se organizan festivales de cine chino, exposiciones de arte, y celebraciones de festividades tradicionales chinas como el Año Nuevo Chino. Estos eventos buscan acercar a la comunidad a las tradiciones y costumbres chinas, fomentando un mayor entendimiento cultural.
2. Talleres educativos: el instituto ofrece talleres sobre diversos aspectos de la cultura china, como la caligrafía, la música y la gastronomía. Estos talleres están diseñados para proporcionar una experiencia de aprendizaje práctica y directa.
3. Conferencias y seminarios: se llevan a cabo conferencias y seminarios que abordan temas de interés común, como la historia, la economía y la filosofía china. Estas actividades están dirigidas a un público amplio y buscan enriquecer el conocimiento sobre China.
4. Intercambio académico y cultural: el instituto fomenta programas de intercambio que permiten a estudiantes y profesores viajar a China para una inmersión cultural y educativa. Esto no solo mejora las habilidades lingüísticas, sino también profundiza el entendimiento intercultural.
Estas actividades reflejan el compromiso del Instituto Confucio de ser un puente cultural entre China y el resto del mundo, promoviendo la colaboración y el entendimiento mutuo entre China y Perú.