El capital mexicano pisa fuerte en la minería peruana. De acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas, México concentra el 17 % de la inversión extranjera en el sector, solo detrás de China y Canadá. El peso lo lleva Grupo México, a través de su filial Southern Copper, con operaciones en Toquepala y Cuajone, y con el proyecto Tía María, cuya inversión supera los USD 1400 millones. Una vez en marcha, se espera que produzca 120 mil toneladas anuales de cobre y aporte más de USD 3400 millones en impuestos y regalías durante sus primeras dos décadas. La presencia mexicana no se limita al sur. En Cajamarca, Southern Copper comparte participación en el proyecto La Reposición (Tantahuatay) junto a Buenaventura, reforzando su presencia en un corredor aurífero estratégico. Mientras el Perú se debate entre conflictos sociales y promesas de inversión, los capitales mexicanos siguen marcando territorio, confirmando al país como uno de los destinos mineros más codiciados de la región.
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