El mercado global vivió un giro abrupto entre el miércoles y el jueves. Lo que empezó con dudas y señales de agotamiento terminó convertido en un rally generalizado gracias a un solo nombre: Nvidia. La compañía volvió a entregar resultados que desafían cualquier parámetro histórico y, por extensión, cambiaron el tono de las bolsas en cuestión de horas.
Wall Street da la vuelta y Asia sigue el impulso
Los futuros estadounidenses pasaron de la debilidad a una ola de compras durante la noche.
- Dow Jones Mini: +300 puntos
- S&P 500 Mini: +90 puntos
- Nasdaq Mini: +450 puntos
El rebote estaba cantado: Nvidia había vuelto a superar todas las expectativas.
El efecto arrastró a Asia en su sesión matinal. Las bolsas respondieron con entusiasmo:
- Taiwán (TWI): +3,18%
- Tokio (Nikkei 225): +2,65%
- Corea del Sur (Kospi): +1,92%
En los tres casos, el patrón fue idéntico: compras masivas en semiconductores, tecnología y compañías expuestas al ecosistema de IA.
Nvidia vuelve a romper su propio récord
Antes del reporte, la acción ya venía descontando buenas noticias: cerró con un alza de 2,85% hasta USD 186,52, en un mercado que esperaba señales claras sobre la demanda de chips de IA.
Después del cierre, en el after-hours, el papel se disparó rumbo a los USD 200, impulsado por cifras que otra vez parecían irreales.
Resultados del trimestre (Q3 FY2026):
- Ingresos: USD 57.006 millones
(vs. 35.082 millones hace un año → +62%) - Ganancia neta: USD 31.910 millones
(vs. 19.309 millones → +65%) - EPS: USD 1,30
(consenso: USD 1,25)
El consenso esperaba USD 54.790 millones en ventas. Nvidia entregó más de USD 2.200 millones adicionales.
La lectura del mercado es simple: la demanda por chips de IA sigue absolutamente encendida.
Y lo que viene es aún mayor: guía explosiva
Para el cuarto trimestre fiscal, Nvidia proyecta:
- Ingresos: USD 65.000 millones (+/- 2%)
- Margen bruto: 74,8%
- Margen non-GAAP: 75,0%
En otras palabras:
la empresa anticipa otro trimestre de expansión acelerada, con ventas que ya son mayores que las de toda la industria de semiconductores combinada hace algunos años.
No hay señales de desaceleración. No todavía.
Por qué esto importa para el mercado entero
La narrativa de las últimas semanas en Wall Street había cambiado:
- dudas sobre el ritmo de inversión en IA
- retrocesos en las grandes tecnológicas
- expectativas de correcciones más profundas
Nvidia volvió a romper ese patrón. Sus cifras funcionan como un ancla emocional y racional para el mercado:
- Emocional, porque es el símbolo del boom de IA.
- Racional, porque sus ventas son un termómetro de la inversión global en tecnología.
Mientras Nvidia crezca, el mercado puede justificar valoraciones elevadas en todas las compañías relacionadas.
Conclusión: la “Kursrakete” sigue siendo el motor del mercado
Dirk Friczewsky lo define como una Kursrakete, un cohete bursátil. Y lo es.
Una sola empresa volvió a cambiar el ánimo global en menos de 24 horas.
Si los próximos trimestres mantienen este ritmo, Nvidia seguirá siendo el estabilizador psicológico del mercado tecnológico y, por extensión, del S&P 500.
Por ahora, la pregunta no es si Nvidia puede sorprender.
La pregunta es cuánto tiempo más puede crecer a esta velocidad sin que el resto del mundo se quede sin aliento.