El actual comportamiento de los mercados estadounidenses puede entenderse con dos siglas clave del argot financiero: FOMO (Fear Of Missing Out) y TINA (There Is No Alternative). Juntas, describen las fuerzas emocionales y estructurales que están impulsando tanto al mercado bursátil como al de bonos.
El miedo a quedarse fuera del rally
En la Bolsa de Nueva York, el temor de perderse el ascenso de acciones o índices tras una corrección alimenta una dinámica alcista continua. Es el efecto FOMO: una suerte de codicia revestida de urgencia que lleva a los inversionistas a entrar, incluso con precios elevados, por no quedarse al margen de la recuperación.
Este comportamiento es especialmente notorio en el sector tecnológico, donde las valoraciones siguen subiendo pese a la volatilidad general.
El mercado de bonos y la ausencia de alternativas
En el otro extremo, el mercado de deuda de EE.UU. se ve impulsado por el efecto TINA: “no hay alternativa”. ¿Dónde más podrían estacionarse billones de dólares, euros o yuanes con la misma seguridad y liquidez?
Según datos del Banco de Pagos Internacionales (BIS), el mercado de bonos estadounidense representa más del 40% del total global, que asciende a unos USD 140,7 billones (2023). La Unión Europea y China le siguen con apenas el 18% y 16% respectivamente.
Por tamaño, profundidad y capacidad de absorber flujos masivos de inversión, ningún otro mercado ofrece las condiciones estructurales del estadounidense. Es por ello que, pese a la presión sobre la deuda pública, los bonos del Tesoro siguen siendo percibidos como una opción sin alternativas reales.
Un problema creciente para la Fed
La Reserva Federal ha advertido repetidamente sobre la insostenibilidad del déficit fiscal de EE.UU. Pero ahora, los inversionistas están exigiendo mayores tasas de interés para comprar bonos del Tesoro, en respuesta al nuevo paquete tributario propuesto por la administración Trump.
Ese proyecto, ya aprobado por la Cámara de Representantes el 22 de mayo, pasará ahora al Senado. De concretarse, añadirá billones de dólares a la deuda nacional, exacerbando las preocupaciones sobre la solvencia fiscal del país.
La Fed se enfrenta así a un dilema: mientras intenta contener la inflación y sostener la estabilidad monetaria, debe lidiar con un Tesoro que demanda cada vez más financiamiento a costos crecientes.
Dirk Friczewsky, ActivTrades.
Aviso Legal: La operativa o negociación de instrumentos financieros conlleva un alto riesgo de perder su dinero. La información proporcionada es solamente con fines educativos y no debe ser tomada como consejo de inversión. Por lo tanto, cualquier persona que tome una decisión de inversión basada en la información presentada, lo hace bajo su propio riesgo.