El estudio “Barreras de empleabilidad: Generación Plateada”, elaborado por Datum por encargo de la Fundación Romero, revela que el 75% de los peruanos mayores de 50 años considera su experiencia acumulada como su mayor fortaleza profesional y que el 73% está dispuesto a seguir aprendiendo para adaptarse a los nuevos retos del mercado laboral. Estos hallazgos plantean una mirada esperanzadora sobre el potencial del talento senior y la necesidad de fortalecer su participación en la economía.
En un escenario global marcado por una transformación demográfica sin precedentes —en el que se vive más y se nace menos—, las proyecciones apuntan a que para el 2050 cerca del 18,9% de la población de América Latina y el Caribe tendrá más de 65 años, prácticamente el doble que en el 2024, según el Observatorio Demográfico 2024 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Asimismo, la ONU estima que la población regional alcanzará su punto máximo en 2058, con menos de 768 millones de habitantes.
En este contexto, el estudio de Datum evidencia que, lejos de retirarse, el talento silver busca seguir aportando al desarrollo del país. Las personas mayores de 50 años valoran su compromiso, responsabilidad y experiencia para resolver situaciones complejas, cualidades cada vez más requeridas en entornos cambiantes que demandan resiliencia, visión estratégica y estabilidad emocional.
Este panorama implica grandes desafíos para generar estrategias que promuevan la empleabilidad de todos los grupos etarios, en especial del talento senior, cuyo potencial sigue siendo subestimado. A nivel mundial, la esperanza de vida pasará de 73 años en 2022 a 77 años en 2050, lo que obliga a repensar el modelo laboral y apostar por una economía intergeneracional.
El estudio también evidencia que, lejos de retirarse, el talento silver busca seguir aportando al desarrollo del país. Las personas mayores de 50 años asocian su trayectoria con valores como el compromiso, la responsabilidad y la capacidad de manejar situaciones complejas, cualidades cada vez más valoradas en entornos laborales que demandan resiliencia, visión estratégica y estabilidad emocional.
Asimismo, uno de cada dos encuestados considera que la tecnología no representa una barrera, sino una oportunidad de desarrollo. Esta disposición a reinventarse rompe con los estereotipos y pone sobre la mesa la necesidad de construir una economía intergeneracional, donde el talento se valore por su aporte y no por su edad.
Entre las principales líneas de acción identificadas para potenciar la empleabilidad del talento 50+ se encuentran:
- Capacitación en habilidades digitales y blandas.
- Sensibilización empresarial para eliminar sesgos generacionales.
- Programas de mentoría intergeneracional que impulsen el aprendizaje colaborativo.
En esa misma línea, el 74% de las personas encuestadas considera fundamental acceder a formación continua, y más de la mitad reconoce como urgente cambiar la percepción cultural que asocia la edad con obsolescencia.
Estas cifras y reflexiones fueron presentadas en el marco del 1er Foro Generación Plateada: Edición Empleabilidad, organizado por la Fundación Romero y el BID Lab. El evento reunió a representantes del sector empresarial, académico y público, y puso en agenda nacional la importancia de integrar la economía de la longevidad en las estrategias de desarrollo sostenible.
“El talento no se jubila, se transforma. Este foro ha marcado el inicio de una agenda por una economía intergeneracional, donde la experiencia del talento silver sea vista como una ventaja estratégica. Desde la Fundación Romero, seguiremos impulsando un ecosistema de empleabilidad más justo, donde todas las generaciones encuentren un lugar para crecer y aportar”, afirmó Martín Pérez Monteverde, director de la Fundación Romero.
Con esta iniciativa, la Fundación Romero reafirma su compromiso de contribuir a un mercado laboral más inclusivo, donde la longevidad se reconozca como una oportunidad para crecer, innovar y transformar.