La temporada de balances en Alemania entra en su tramo final y este miércoles fue el turno de cinco pesos pesados del DAX: Bayer, Brenntag, E. ON, Infineon Technologies y RWE. El cuadro es heterogéneo, con señales de desaceleración en algunos sectores y proyecciones más sólidas en otros.
Brenntag: resultados a la baja y recorte de expectativas
El distribuidor químico Brenntag presentó cifras débiles en su balance a septiembre.
Los ingresos retrocedieron de 12.248 millones en 2024 a 11.659 millones de euros en 2025. El beneficio neto cayó con fuerza, de 415 millones a 293 millones, y el beneficio por acción pasó de 2,82 a 2,01 euros.
La compañía ajustó nuevamente a la baja su guía anual: ahora espera un EBITA operativo entre 950 millones y 1.050 millones, frente a la banda previa de 1.100–1.300 millones. Una señal clara de presiones persistentes en la demanda global.
E. ON: más inversión y ligera mejora del beneficio
En contraste, el gigante energético E. ON mostró un desempeño más estable.
Los ingresos avanzaron apenas un 2% hasta 57.514 millones de euros, pero el beneficio neto ajustado mejoró un 4%, llegando a 2.298 millones. El beneficio por acción ajustado subió de 0,84 a 0,88 euros.
La compañía confirmó su pronóstico anual: un EBITDA ajustado de 9.600–9.800 millones, y un beneficio neto ajustado de 2.850–3.050 millones. Las inversiones también se aceleran: de los 7.500 millones de 2024 a 8.600 millones en 2025, reflejando su apuesta por infraestructura y redes inteligentes.
Infineon: foco en la energía para la IA
El sector tecnológico quedó representado por Infineon, que reportó resultados del cuarto trimestre y del ejercicio 2025, que cierra cada septiembre.
Los ingresos cayeron ligeramente de 14.955 a 14.662 millones y el beneficio neto se redujo de 1.301 a 1.015 millones. El beneficio por acción bajó de 0,98 a 0,77 euros.
Sin embargo, la compañía lanzó una señal potente hacia el futuro: espera un aumento moderado de ingresos en 2026, impulsado por la explosión de la demanda de soluciones de alimentación eléctrica para centros de datos de inteligencia artificial.
Solo ese segmento generaría 1.500 millones de euros en 2026, y el mercado podría alcanzar entre 8.000 y 12.000 millones hacia finales de la década, abriendo un enorme potencial adicional.