Bancos en el Perú pierden más de US$750 millones por excluir a las mujeres de los servicios financieros

Caretas en alianza con Youtrading | Solo para el caso peruano son un total de US$756 millones dólares de ingresos anuales que pueden obtenerse satisfaciendo la demanda de las clientas no bancarizadas y sub-atendidas.

Casi US$3 mil millones es la cantidad de ingresos anuales adicionales que no generan los bancos y otros proveedores por no brindar servicios financieros a las mujeres en la misma proporción que a los hombres para los casos de Guatemala, México y Perú.

“Los cálculos desvelan que las instituciones financieras podrían conseguir casi 3 mil millones de dólares de ingresos anuales adicionales, si optimizan sus ofertas enfocadas en el mercado de la mujer para empresarias y banca personas”, revela Milagros Rivas, directora General de Servicios de Asesoría del BID Invest.

“De los bancos con productos destinados a mujeres, la mayoría los consideran un aspecto de responsabilidad social corporativa o de sus iniciativas ambientales, sociales y de gobernanza, más que una oportunidad de crecimiento y negocios”, añade. 

Solo para el caso peruano son un total de US$756 millones dólares de ingresos anuales que pueden obtenerse satisfaciendo la demanda de las clientas no bancarizadas y sub-atendidas.
Paradójicamente, el segmento de mayor potencial se concentra en los tramos de ingresos más bajos, que comprenden el 86 por ciento de la población femenina de Perú.

Aun cuando los estudios demuestran que las mujeres son buenos clientes para la banca de personas y empresas, no hay suficientes productos diseñados por para ellas, advierte la representante del organismo dependiente del Banco Interamericano de Desarrollo. 

Alrededor de un tercio de los bancos comerciales en Guatemala, México y Perú cuentan con una estrategia de mercado para la mujer, aunque un 40% afirman que está considerando desarrollarla, según Empresarias en Ascenso: Un estudio sobre el potencial de la banca mujer en América Latina y el Caribe del BID Invest. 

Rivas recuerda que las carteras de crédito prestadas a las mujeres experimentan mayores tasas de crecimiento y son usuarias activas de servicios no financieros.   “Además, las mujeres pagan sus préstamos en menos tiempo que los hombres”, apunta.

Marisela Alvarenga, directora General del Sector Financiero del BID Invest, observa que las mujeres poseen casi una cuarta parte de las empresas emprendedoras y de las pequeñas y medianas empresas (pymes) en América Latina.

El femenino es un segmento comercial lleno de potencial, con un importante poder adquisitivo colectivo y perspectivas de crecimiento importantes. Pero es desaprovechado por la banca comercial en la región. 

“Sabemos que hoy en nuestra región, las mujeres son propietarias de casi una cuarta parte de emprendimientos, y de las pequeñas y medianas empresas”, expresa.

La brecha crediticia de las mujeres es de 86 mil millones (unos US$260 por persona en Estados Unidos), y es una de las más altas del mundo.

“Apenas el 18% ciento de las instituciones financieras que no tienen definido el segmento de las pequeñas y medianas empresas (PYME) cuentan con una oferta específica para mujeres empresarias, mientras que el 85% de las que sí lo tienen ofrecen productos orientados a ellas”, concluye.