Paolo Guerrero ha quedado libre tras su desvinculación del Club Universidad César Vallejo, según la reciente resolución de la Cámara de Conciliación y Resolución de Disputas de la Federación Peruana de Fútbol (FPF). La situación se generó debido a desacuerdos entre el jugador y el club, con Guerrero solicitando su salida alegando incumplimiento de contrato por parte de la institución. Esta decisión permite al histórico delantero peruano buscar nuevas oportunidades, siendo Alianza Lima el equipo que suena con más fuerza como su próximo destino.
El conflicto se intensificó luego de que ambas partes no lograran un acuerdo durante una audiencia realizada esta semana. En su momento, Richard Acuña, presidente de la UCV, expresó su desacuerdo con la postura del delantero, subrayando la importancia de respetar los contratos y las leyes. Además, el club había solicitado una compensación económica significativa, que oscilaba entre medio millón y un millón de dólares, para liberarlo de sus compromisos contractuales.
“En los últimos precedentes que se han dado, han sido siempre con una institución como Alianza Lima. Ha sacado a tres jugadores de esa manera. Al jugador Noriega, a Huamán y Neira de Unión Comercio”, declaró ante la prensa Richard Acuña.
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Paolo Guerrero ahora debe evaluar su futuro, ya que la salida de la UCV marca el fin de una etapa en la que no logró establecerse de manera sólida en el fútbol peruano tras su regreso de ligas extranjeras. Su experiencia y estatus como goleador histórico de la selección lo convierten en una pieza codiciada, pero estos últimos problemas y actitudes podrían significar también complicaciones para concretar contratos futuros.