Guillermo Enrique, lateral derecho argentino que recientemente dejó Alianza Lima, habló públicamente desde Argentina para aclarar los motivos de su salida del club íntimo y responder a los múltiples rumores que surgieron en las últimas semanas.
En diálogo con el programa En Pared de TV Perú, Enrique descartó que su salida se haya debido a problemas físicos o lesiones, afirmando que siempre mantuvo un cuidado riguroso de su condición: la decisión de no renovar su contrato fue estrictamente institucional y motivada por la intención de la dirigencia de traer nuevos jugadores para su posición.
El exjugador también se refirió a la supuesta pelea con Paolo Guerrero, uno de los temas más comentados tras su salida. Si bien reconoció que hubo un cruce con el capitán blanquiazul en un entrenamiento, aseguró que la situación fue exagerada por los medios y no pasó de un intercambio verbal; al día siguiente ambos dialogaron y se reconciliaron con normalidad.
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Enrique aprovechó para hablar de la indisciplina interna que marcó la temporada de Alianza Lima, con múltiples casos de jugadores envueltos en fiestas y videos que trascendieron en redes y medios. Señaló que esas situaciones “no se podían controlar” y lamentó que hayan sido una constante durante el año, comparando la disciplina dentro del plantel peruano con la rigurosidad que se vive en el fútbol argentino.
Respecto a su futuro profesional, Guillermo Enrique no cerró puertas a continuar en la Liga 1 peruana y mencionó que su representante evalúa ofertas para 2026, sin descartar opciones como Sporting Cristal o Universitario, resaltando que como profesional “nunca se le cierra las puertas a nadie”.