Cecilia Giménez Zueco, la mujer que alcanzó notoriedad internacional por la restauración del fresco Ecce Homo en el Santuario de la Misericordia de Borja, falleció a los 94 años, según confirmaron autoridades locales este lunes. Su muerte cierra una historia singular que trascendió el ámbito artístico y se instaló en la cultura popular global.
Giménez, vecina histórica del municipio aragonés, era una pintora aficionada que en 2012 intentó recuperar una obra deteriorada del siglo XIX. El resultado generó impacto inmediato por su aspecto inusual y se viralizó en todo el mundo, provocando una oleada de reacciones, memes y debates sobre el arte, la restauración y el valor cultural de las obras.
Con el paso del tiempo, lo que comenzó como una polémica se transformó en un fenómeno inesperado. El Ecce Homo restaurado atrajo a miles de visitantes de distintos países y convirtió a Borja en un punto de interés turístico internacional, con un impacto económico significativo para la localidad. Cecilia Giménez pasó de ser objeto de críticas a convertirse en un símbolo de la cultura popular contemporánea.
En sus últimos años, fue reconocida por el pueblo y por instituciones culturales como una figura entrañable, vinculada de manera inseparable a uno de los episodios más singulares del arte reciente en España. Su fallecimiento generó numerosas muestras de afecto y despedida, tanto a nivel local como internacional.