En nuestro país, hoy, en pleno siglo XXI, se censuran películas, se retiran documentales por presión política, no hay ningún apoyo para el teatro, han dejado al cine nacional, sobre todo al regional, desamparado y ahora este congreso que tiene un 2 % de aprobación intenta tirarse abajo una ley que protege (aunque no completamente), a los actores y actrices, con un dictamen aprobado por unanimidad por la comisión de Cultura del Congreso, pero que aún no ha llegado al pleno.
La ley 28131, presentada por Elvira de la Puente, entonces congresista y aprobada en 2003, dice que cuando una película, telenovela o serie se vuelve a emitir, sus actores reciben regalías. Así funciona en todo el mundo, los actores y actrices cobran un derecho de comunicación pública, como en todo país que tiene un mínimo de respeto por el trabajo de sus artistas. Esto no es un favor, no es un bono, no es caridad, ni siquiera es un estímulo que les da el Estado, porque el Estado no les da nada. Esto es un derecho que les corresponde por ley y está reconocido por tratados internacionales.
Además, el dinero que se les paga no sale del Estado, no sale de nuestros impuestos, como muchos piensan, el dinero sale del bolsillo de los dueños de los canales de televisión y plataformas, empresas privadas que siguen facturando con esas producciones. La pregunta se cae de madura: entonces ¿A quién beneficia este intento de modificar la ley? ¿Saben que le están quitando también dinero al Estado, porque por cada pago que se le hace a un actor por regalías, hay un impuesto del 5 %? ¿Qué interés tienen los congresistas en ahorrarle dinero a los dueños de las televisoras? …Vamos, si se ve como pato, camina como pato y dice cua cua, pues…es un pato, ¿no?
Los actores y actrices no se van a quedar de brazos cruzados. Desde que Inter Artis, la organización que los representa, informó de esta nueva agresión del gobierno contra el arte y la cultura, figuras de todas las generaciones han compartido videos en sus redes sociales expresando su malestar y, por primera vez, han logrado ‘reunirse’ más de 800 actores (algunos presencialmente y otros en forma virtual) para tomar acción e impedir que esta modificación que vulnera sus derechos básicos sea aprobada en el pleno.
Y es que, aunque la cultura y el arte en nuestro país han sido siempre la última rueda del coche, este es un atropello que no tiene ninguna explicación lógica, ni siquiera una coartada como sucedió con la ley del cine, porque el dinero salía del Estado. Se les está quitando el único derecho que tiene un grupo de ciudadanos, que trabaja como cualquier peruano, en una situación de inestabilidad total, porque si bien hay épocas en las que pueden tener mucho trabajo, también están aquellas en las que no hay nada, aunque su trabajo siga dando vueltas en los canales de televisión una y otra vez ¿Se imaginan si les quitaran las regalías a los escritores? Pero mejor, no doy ideas, este Congreso es capaz de hacerlo.
Los actores no tienen jubilación, eso es algo que no se logró nunca. Por lo tanto, esta ‘modificación’ de la ley, afectaría, especialmente, a los actores que ya no trabajan y que su única esperanza es vivir de sus regalías, que son el fruto de su trabajo, del cual se siguen beneficiando empresas que, quién sabe por qué, terminan siendo favorecidas.
Para evitar ese retroceso brutal en los derechos de los artistas en el Perú, los representantes de Inter Artis, se reunirán el lunes 2 de junio a las 10 de la mañana con los integrantes de la comisión de Cultura a ver si los convencen de retractarse y no pasar el dictamen aprobado al pleno. Mientras eso pasa, habrá un plantón de los actores y actrices frente al Congreso y ojalá todos los que puedan, los acompañen en esta defensa por sus derechos.