El alcalde de Lima, Renzo Reggiardo, defendió la construcción de los viaductos en la avenida Javier Prado, asegurando que la mayoría de los ciudadanos se beneficiará una vez que las obras entren en operación. Durante sus declaraciones, el burgomaestre reconoció las molestias expresadas por vecinos de San Isidro, La Molina y Magdalena, pero sostuvo que el proyecto está respaldado por estudios técnicos y responde a la necesidad de mejorar la fluidez vehicular en la capital.
Reggiardo enfatizó que la intervención vial busca aliviar la congestión en Lima Metropolitana, una de las principales preocupaciones de los ciudadanos.
Solicitud de transferencia al Ejecutivo
El alcalde solicitó al Ejecutivo autorizar la transferencia de 180 millones de dólares, provenientes de una donación del Banco Mundial, para implementar semáforos inteligentes en 500 intersecciones de la ciudad. Esta iniciativa forma parte de un plan de modernización y sincronización del tránsito que lleva varios años en desarrollo, incluyendo la implementación de una “ola verde” en tramos críticos de Javier Prado.
Respaldo técnico y planificación municipal
Reggiardo aseguró que los estudios previos fueron elaborados por especialistas y validados por funcionarios de la Municipalidad Metropolitana y la empresa Invermed, destacando que el proyecto no se basa en decisiones improvisadas. “Tengo que respaldar a mis funcionarios”, afirmó, subrayando la rigurosidad del análisis que sustenta la obra.
El alcalde reiteró que estos proyectos son fundamentales para garantizar una mejor transitabilidad y seguridad vial, al tiempo que proyectan beneficios a largo plazo para la población limeña.
Equilibrio entre molestias y beneficios
Reconociendo la oposición vecinal, Reggiardo comparó la situación con su hija usando la metáfora: “Para freír huevos hay que romperlos”, refiriéndose a que algunos inconvenientes temporales son inevitables para lograr mejoras significativas en la infraestructura urbana. Con ello, reiteró su compromiso de continuar impulsando obras que contribuyan al desarrollo de la ciudad y confió en que los limeños reconocerán el impacto positivo de las intervenciones una vez concluidas.