El Santos de Neymar logró mantenerse en la Serie A brasileña tras vencer 3‑0 a Cruzeiro en la última fecha del Brasileirao, asegurando su permanencia y evitando una nueva caída.
Para conseguirlo, el club contó con un decisivo aporte de Neymar. A pesar de arrastrar una lesión de menisco, el delantero insistió en jugar y fue pieza clave en la recta final: sumó goles fundamentales en jornadas previas y participó activamente en el triunfo ante Cruzeiro.
Tras el pitazo final, Neymar no pudo contener la emoción. Afirmó que estos meses fueron “muy difíciles”, confesó que tuvo que pedir ayuda psicológica y agradeció el apoyo de su familia, compañeros y cuerpo técnico.
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El festejo no solo representa la permanencia del club, sino también un respiro económico y deportivo para un equipo que poco antes había regresado a primera división tras una severa crisis. Santos ahora espera definir su futuro deportivo y el del delantero de cara a la temporada próxima.
Además, según reporta la prensa especializada, el objetivo de Neymar es estar en forma para ser considerado dentro de los convocados por Carlo Ancelotti para el Mundial 2026.