El presidente del Congreso, Fernando Rospigliosi, expulsó del pleno al abogado Raúl Noblecilla luego de que este lanzara graves insultos contra el exmandatario Alberto Fujimori durante su intervención en la defensa de la expremier Betssy Chávez.
Noblecilla acudió al Legislativo para sustentar la posición de su patrocinada en el proceso de denuncia constitucional que también alcanza al expresidente Pedro Castillo y que podría derivar en una inhabilitación de hasta diez años para ejercer cargos públicos.
Los insultos que originaron la expulsión
Durante su exposición, el abogado afirmó que reconocía en el hemiciclo a “camaradas” que —según dijo— en los años noventa calificaban a Fujimori como “desgraciado, sátrapa” y “prácticamente a la altura de Satanás”. En un momento agregó: “Pobre Satanás para ponerlo a la altura de ese desgraciado”.
Rospigliosi, de Fuerza Popular, interrumpió la intervención y advirtió que no permitiría más agravios. Sin embargo, Noblecilla continuó criticando a las bancadas aliadas del gobierno de Dina Boluarte y a quienes —según afirmó— avalaron la represión que dejó más de 70 fallecidos durante las protestas de 2022 y 2023.
“Eso está ahí, esperando democracia para que se juzguen a esos asesinos, a esos traidores, a esos vendepatrias”, señaló antes de ser retirado por personal del Parlamento. El abogado se retiró lanzando frases y gesticulando.
Contexto judicial del caso Chávez y Castillo
La intervención de Noblecilla se dio días después de que Pedro Castillo fuera condenado a 11 años, 5 meses y 15 días de prisión por conspiración para la rebelión durante el fallido golpe del 7 de diciembre de 2022. La Sala Penal Especial determinó que no se consumó el delito de rebelión, lo que redujo la pena inicialmente solicitada por la Fiscalía.
La misma condena recayó sobre Betssy Chávez —actualmente asilada en la residencia de la Embajada de México en Lima— y sobre el exministro del Interior, Willy Huerta. En este último caso, la pena quedó suspendida en caso de apelación.
Asimismo, el exjefe del gabinete y asesor de Castillo, Aníbal Torres, recibió una sentencia de seis años y ocho meses, la cual quedó sin efecto por razones humanitarias debido a su edad (82 años). Los exjefes policiales Manuel Lozada y Justo Venero fueron absueltos.