El debate sobre el uso de recursos estatales en períodos electorales vuelve a instalarse en el Parlamento. El primer vicepresidente encargado de la Presidencia del Congreso, Fernando Rospigliosi Capurro, anunció que propondrá a la Mesa Directiva la suspensión de la asignación de pasajes aéreos y viáticos a congresistas y asesores durante los meses de enero, febrero y marzo del 2026, en los que se desarrollará la campaña electoral.
La iniciativa apunta, según explicó, a prevenir cualquier cuestionamiento o sospecha respecto al uso de recursos públicos en un contexto político particularmente sensible. La propuesta será presentada en la siguiente sesión de la Mesa Directiva, instancia que deberá evaluar su debate y eventual aprobación.
Una medida preventiva ante el inicio de la campaña
Rospigliosi recordó que esta misma propuesta ya había sido planteada durante su gestión como presidente de la Comisión de Constitución y Reglamento, donde advirtió la necesidad de establecer límites claros al uso de beneficios parlamentarios en tiempos electorales. En esta oportunidad, reiteró que la suspensión sería temporal y solo aplicaría en los meses iniciales del 2026, periodo en el que los legisladores y sus equipos suelen intensificar sus actividades en regiones.
El beneficio que se busca suspender corresponde a los pasajes y viáticos otorgados en el marco de la semana de representación, mecanismo mediante el cual los parlamentarios visitan sus regiones para atender demandas locales, supervisar obras y reunirse con autoridades. Para Rospigliosi, evitar este gasto en los meses previos a las elecciones permitirá reducir cualquier potencial malentendido respecto al uso de fondos públicos.
“Ni los congresistas ni sus asesores deben cobrar viáticos ni contar con pasajes durante este periodo”, afirmó en declaraciones difundidas por la multiplataforma informativa del Congreso. Su objetivo, insistió, es prevenir cualquier “mala interpretación” que pudiera surgir por parte de la ciudadanía.
Expectativa por el debate en la Mesa Directiva
El legislador expresó su confianza en que la iniciativa encontrará respaldo entre los integrantes de la Mesa Directiva, dado que —según señaló— se trata de una medida que contribuye a la transparencia y al uso responsable de los recursos públicos.
Rospigliosi remarcó que el propósito central es “evitar cualquier tipo de problema en el uso de recursos públicos en la campaña electoral del 2026”. Sin embargo, la decisión final dependerá del consenso al interior del órgano directivo del Parlamento.
El planteamiento llega en un momento en que la opinión pública ha mostrado creciente atención al uso de fondos estatales en actividades políticas. Por ello, la propuesta intenta adelantarse a potenciales controversias que podrían afectar la imagen institucional del Congreso.
Un debate recurrente en períodos electorales
El uso de recursos públicos durante campañas electorales ha sido motivo de controversias en años anteriores. Las asignaciones para semana de representación, gastos operativos y logística parlamentaria suelen ser objeto de escrutinio ciudadano, especialmente cuando coinciden con procesos electorales donde los congresistas buscan la reelección o promocionar a sus agrupaciones políticas.
Al suspender temporalmente pasajes y viáticos, se busca no solo evitar el uso indebido de estos recursos, sino también reforzar la percepción de integridad y neutralidad del Parlamento. Este tipo de medidas preventivas, según especialistas, contribuyen a marcar una línea clara entre la labor institucional del legislador y su actividad política personal.
Por ahora, no se ha informado si la Mesa Directiva evaluará medidas complementarias o si la discusión podría ampliarse a otras asignaciones parlamentarias. Lo que sí está claro es que la propuesta de Rospigliosi abre un debate que podría extenderse en los próximos días.