Firma de la autógrafa y objetivos de la ley
El primer vicepresidente encargado de la Presidencia del Congreso, Fernando Rospigliosi Capurro, firmó la autógrafa de ley que establece el marco normativo e institucional para garantizar igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres. La norma busca proteger el ejercicio de los derechos a igualdad, dignidad, libre desarrollo, bienestar y autonomía, proscribiendo toda forma de discriminación basada en el sexo y promoviendo la igualdad en los ámbitos político, laboral, económico, social, cultural y demás.
Rospigliosi destacó la relevancia de la ley en un contexto donde, según su análisis, existen ideologías que podrían influir negativamente en la formación de los niños. “Eso es una perversión que no debemos permitir”, señaló el titular del Parlamento.
Rol de la congresista Milagros Jauregui
La legisladora Milagros Jauregui de Aguayo, de la bancada Renovación Popular, subrayó la importancia de resaltar los derechos y valores tanto de hombres como mujeres, destacando que “ninguno puede ser tratado de manera inferior porque tienen los mismos derechos”.
Jauregui enfatizó que la ley permitirá un enfoque educativo que proteja a los menores y que promueva una educación sexual basada en la ciencia, biología y ética, sin influencia de ideologías externas. “Los niños tienen que ser niños; crearnos libremente, formarnos y cuando sean adultos tomar la decisión que deseen”, indicó.
Reemplazo del enfoque de género por igualdad de oportunidades
Desde la aprobación de la Ley 28983 en 2007, los conceptos de sexo y género han sido interpretados de manera diversa en políticas públicas, según los congresistas. La nueva norma reemplaza el enfoque de género por igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, y sustituye la educación sexual integral por una educación sexual con base científica, biológica y ética, con el objetivo de garantizar la igualdad real en todos los ámbitos de la sociedad.
Rospigliosi confió en que el presidente José Jerí firmará y promulgará la ley en los próximos días, consolidando así el compromiso del Congreso con la igualdad y la protección de los derechos fundamentales.