Pese a la aparente serenidad de su discurso, Elon Musk y su equipo financiero no lograron convencer a los mercados.
Tesla insiste en que continúa realizando las inversiones necesarias para fortalecer su modelo de negocio actual —centrado en transporte, energía y robótica—, pero los inversores esperaban cifras que respalden esa narrativa.
Musk volvió a destacar el potencial de la compañía en los campos de conducción autónoma, robotaxis y robótica (su proyecto Optimus), aunque para muchos analistas el mensaje sonó a repetición.
Trimestre flojo pese al alza de ingresos
Tesla reportó un ingreso total de 28.095 millones de dólares en el tercer trimestre de 2025, frente a los 25.182 millones del mismo periodo de 2024.
Sin embargo, el beneficio neto cayó 37%, pasando de 2.173 millones a 1.373 millones, y el beneficio por acción (EPS) se redujo de 0,72 a 0,50 dólares, por debajo de la previsión de consenso (0,54 USD).
Por el lado positivo, los ingresos superaron las estimaciones del mercado (26.370 millones de USD), pero el descenso de utilidades dejó un sabor amargo entre los inversionistas.
La producción global bajó 5% (de 469.796 a 447.450 vehículos), mientras que las entregas aumentaron 7%, hasta 497.099 unidades.
La acción cerró el miércoles 22 de octubre en 438,97 USD, con una caída de 0,82 %, y retrocedió hasta 418 USD en el after-hours, reflejando el desencanto inmediato del mercado.
Presión externa y subsidios en retirada
El tercer trimestre estuvo impulsado por la última ola de subsidios para vehículos eléctricos en EE. UU., que expiraron en septiembre.
Este factor sugiere que el cuarto trimestre podría mostrar cifras más débiles, especialmente con los nuevos aranceles aplicados a la importación de componentes y baterías.
El propio Musk, junto al CFO Vaibhav Taneja, advirtió que los costos regulatorios y de competencia están afectando los márgenes.
El sector enfrenta una competencia cada vez más feroz, liderada por BYD en China y la Volkswagen Group en Europa, ambos con mayor escala y diversidad de modelos eléctricos.
Análisis técnico: zona de riesgo
Desde el punto de vista gráfico, el CFD de Tesla (NASDAQ: TSLA) mantiene un comportamiento lateral tras el rebote iniciado en abril.
El rango de referencia va desde el máximo del 18 de diciembre de 2024 (488,36 USD) hasta el mínimo del 7 de abril de 2025 (214,25 USD).
Con base en una lectura de retrocesos Fibonacci, las resistencias más cercanas se ubican en 488,36 (100 %), 553,05 (123,6 %), 593,07 (138,2 %) y 657,76 USD (161,8 %).
Los soportes aparecen en 423,67 (76,4 %), 383,65 (61,8 %), 351,30 (50 %), 318,96 (38,2 %), 278,94 (23,6 %) y el mínimo estructural en 214,25 USD.
El RSI, en 55,6 puntos, refleja un mercado técnicamente neutral, sin señales inmediatas de sobrecompra o sobreventa.
Sin embargo, si el precio perfora el nivel de 383 USD, el sesgo podría tornarse bajista en el corto plazo.
Conclusión
Los resultados confirman que Tesla mantiene el crecimiento de ingresos, pero pierde rentabilidad, con márgenes presionados por la competencia y los aranceles.
La narrativa de Musk sobre el futuro de la robótica y los vehículos autónomos todavía no logra traducirse en números.
Los inversores, cada vez más escépticos, esperan hechos concretos antes de volver a apostar fuerte por la acción.
Dirk Friczewsky – analista de ActivTrades.
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