Críticas desde Ica al manejo del orden interno
Desde la región Ica, Rafael López Aliaga pidió la renuncia inmediata del ministro del Interior, Vicente Tiburcio, y del comandante general de la Policía Nacional, Óscar Arriola, luego de los enfrentamientos registrados el pasado 15 de octubre en el centro de Lima.
El líder de Renovación Popular sostuvo que la conducción del orden interno fue “negligente” y cuestionó la demora en la respuesta de las autoridades durante la jornada de protestas que culminó con una persona fallecida y más de un centenar de heridos.
“El ministro Tiburcio no puede estar en la Luna mientras ocurren hechos de esta magnitud”, declaró López Aliaga, insistiendo en que ambos funcionarios deben poner sus cargos a disposición para permitir una revisión transparente del accionar policial.
Identifican al responsable del disparo
El comandante general de la Policía Nacional, Óscar Arriola, confirmó la identificación del suboficial de tercera Luis Magallanes, miembro de la Dirincri, como el autor del disparo que causó la muerte de Eduardo Ruiz Sanz, manifestante de 21 años.
El hecho se registró en el Centro Histórico de Lima durante los enfrentamientos entre la Policía y grupos de manifestantes.
La identificación del agente fue posible gracias al análisis de cámaras de videovigilancia de la Municipalidad de Lima. Magallanes permanece hospitalizado por politraumatismo y bajo custodia policial. El caso es investigado por la Fiscalía Penal Común, con apoyo de la División de Homicidios.
Separan a los oficiales encargados del operativo
Arriola informó además que los generales responsables del operativo del 15 de octubre fueron separados de sus cargos mientras duren las investigaciones internas.
Según explicó, la decisión busca garantizar transparencia institucional y se adoptó en coordinación con el Ministerio Público, que realiza las diligencias conforme a la Ley N.° 32130.
La Fiscalía recolecta pruebas balísticas y videos del operativo, mientras que la Defensoría del Pueblo confirmó un saldo de 120 heridos, entre ellos 32 civiles —tres menores de edad— y 88 policías.
Balance de los enfrentamientos y respuesta institucional
Durante las protestas del 15-O, se reportaron actos de violencia y uso de artefactos pirotécnicos, mientras que algunos efectivos policiales fueron agredidos y desarmados.
En respuesta, la Policía Nacional utilizó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, sin lograr contener del todo los disturbios que se extendieron por la avenida Abancay y calles aledañas.
El alcalde de Lima, Renzo Reggiardo, entregó las grabaciones de seguridad al Ministerio Público, lo que permitió avanzar en la identificación del agente involucrado.
En paralelo, la Defensoría del Pueblo emitió un comunicado reiterando que el derecho a la protesta debe ejercerse de forma pacífica y rechazó toda forma de violencia “venga de donde venga”.