Noche de terror: balacera en pleno show en Chorrillos
Una violenta balacera durante el concierto de Agua Marina en el Círculo Militar – Sede Tarapacá, en Chorrillos, ha conmocionado al país. Lo que parecía ser una noche más de cumbia terminó en un tiroteo que dejó seis personas heridas, entre ellos cuatro integrantes de la banda, un vendedor y un espectador que fue alcanzado por una bala perdida.
Según la Policía Nacional del Perú (PNP), los atacantes usaron armas de fuego de alto calibre y dispararon desde el exterior del recinto, justo detrás del escenario donde se presentaba la popular agrupación.
Aumenta la cifra de víctimas
Inicialmente se reportaron cinco heridos, pero el parte policial actualizado confirmó un sexto afectado, un espectador que fue dado de alta tras recibir una herida leve en el dorso.
Entre los más afectados se encuentran:
- Luis Quiroga Querevalú, músico, quien recibió tres impactos de bala, uno en el tórax y permanece en estado delicado.
- Manuel Quiroga, su hermano, con una herida en la pierna.
- César More Nizama, tecladista, con heridas en el tórax y brazo.
- Wilson Ruiz Julca, animador de la agrupación, con herida en el tórax, internado en el Hospital Guillermo Almenara.
Las autoridades médicas del Hospital Casimiro Ulloa y la clínica Maison de Santé confirmaron que los pacientes están estables pero bajo observación continua.
Investigación en marcha: Fiscalía apunta a tentativa de homicidio
La Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Chorrillos, bajo la dirección de la fiscal Luz Vargas Salazar, ha iniciado diligencias preliminares por el delito de tentativa de homicidio. Se han dispuesto pericias balísticas, biológicas forenses y el análisis de los videos de cámaras de vigilancia de la zona.
Según el general Felipe Monroy, jefe de la región policial Lima, los peritos hallaron 27 casquillos de bala de 9 mm en el lugar, lo que confirmaría el uso de al menos una metralleta durante el ataque.
Un atentado dirigido: disparos fueron hacia el escenario
Las evidencias sugieren que los delincuentes se detuvieron detrás del escenario y dispararon directamente hacia los músicos. Esto refuerza la hipótesis de que el ataque no fue aleatorio, sino un atentado planificado contra Agua Marina.
“No se trató de un robo ni de una pelea entre asistentes. Los disparos fueron realizados con la intención clara de causar daño a quienes estaban en el escenario”, indicó una fuente policial a RPP.
Seguridad bajo cuestionamiento: evento no tenía garantías
El Ministerio del Interior informó que el evento no contaba con las garantías de seguridad exigidas por la Dirección General de Gobierno Interior, y que la PNP no fue notificada oficialmente sobre su realización.
Aunque la Municipalidad de Chorrillos aseguró que el organizador tramitó permisos “por vía regular”, se deslindó de responsabilidad directa, señalando que, por tratarse de un evento privado, la seguridad externa dependía del organizador.
Plan cerco activado y búsqueda de responsables
La PNP activó un plan cerco para capturar a los atacantes, quienes habrían huido en una motocicleta por la avenida Confraternidad. Las cámaras de vigilancia de los alrededores ya están siendo analizadas para identificar a los autores del ataque.
Aunque aún no hay detenidos, el general Monroy señaló que existen líneas de investigación abiertas, y que no se descarta un posible acto de extorsión criminal, dada la ola de amenazas que han denunciado otras agrupaciones musicales.
Reacciones del mundo artístico: temor y solidaridad
La noticia ha causado un profundo impacto en el mundo artístico. Diversas orquestas y figuras del espectáculo han mostrado su apoyo a Agua Marina, condenando el atentado y exigiendo mayor protección a los artistas.
- Corazón Serrano, Grupo 5, Zaperoko, Los Mirlos, entre otros, emitieron comunicados pidiendo justicia.
- Julie Freundt, presidenta de Soniem, lamentó que acuerdos con el Ministerio del Interior no hayan sido implementados.
- Estanis Mogollón, presidente de Apdayc, afirmó que “la inseguridad ya se le fue de las manos al gobierno”.
- Billy Yaipén (Orquesta Candela) cuestionó duramente la falta de leyes que protejan a los músicos peruanos.
Agua Marina: entre la música y la violencia
Agua Marina, con más de 40 años de trayectoria y considerada un ícono de la cumbia peruana, se ha convertido en la segunda agrupación atacada este año, tras el asesinato del cantante de Armonía 10, Paul “El Ruso” Flores, en marzo.
La diferencia esta vez es que el ataque se dio durante el show, en plena interpretación, lo que ha elevado las alarmas de artistas y productores.
Este episodio evidencia la necesidad de reformar el sistema de seguridad para espectáculos públicos, y de atender con urgencia el crecimiento de la extorsión criminal contra bandas musicales, que se ven forzadas a cambiar números, rutas y medidas de protección constantemente.
Lo que sigue: exigencias a las autoridades
Desde la Defensoría del Pueblo hasta colectivos de artistas, la exigencia es clara: se necesita acción inmediata del Estado, reformas legales y garantías reales para que los artistas puedan trabajar sin temor.
Mientras tanto, Agua Marina ha suspendido sus presentaciones y se mantiene enfocada en la recuperación de sus integrantes. La música se detuvo por las balas, pero la lucha por justicia acaba de comenzar.