El fenómeno Labubu

Los curiosos llaveros se erigen como un ícono de la cultura pop. Tras ser mostrados como accesorios por grandes personalidades del mundo, es inevitable no querer uno.

por editorweb@caretas.com.pe

Tiene cuerpo de conejito acolchado, postura de peluche y el tamaño perfecto para entrar en un bolso o colgar de uno. Sin embargo, su distintivo principal es su faz: ojos enormes y tiernos, tenue rubor y pequitas en las mejillas que contrastan con el ceño fruncido y una sonrisa ligeramente macabra que muestra exactamente nueve dientes triangulares y puntiagudos.
Comprar un Labubu es un ritual. La forma oficial de hacerlo es a través de una blind box, una caja sellada, donde no hay forma de saber qué modelo te va a tocar. Algunos son más tiernos, otros más raros, y uno –el secreto– aparece con menos frecuencia que los demás. Quienes no soportan el azar optan por la reventa, adquiriendo el modelo exacto en tiendas no oficiales, a otros coleccionistas o revendedores online.

Suscríbase al contenido

Esto es material premium. Suscríbete para leer el artículo completo.

Suscribete

Accede a todos nuestros contenidos Premium. Más de 100 artículos.

También te puede interesar

 Av. Guardia Civil 1321, Oficina 1802, Surquillo, Lima – Perú

Copyright ©caretas.pe | Por Revista Caretas

Todos los derechos reservados

¿TIENES UNA DENUNCIA? ESCRÍBENOS

Ilustración Peruana

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más

Política de privacidad y cookies
¿Estás segura de que quieres desbloquear esta publicación?
Unlock left : 0
Are you sure want to cancel subscription?