La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) puso en marcha una nueva norma que cambia la forma en que los usuarios realizan compras presenciales con tarjetas nuevas. Desde este 1 de julio, todas las tarjetas de crédito y débito recién emitidas deberán ser usadas ingresando una clave secreta (PIN) en los puntos de venta (POS). La medida busca reducir fraudes y elevar los estándares de seguridad bancaria.
Las tarjetas emitidas antes del 1 de julio seguirán funcionando como hasta ahora, aunque las entidades financieras tienen plazo hasta abril del 2026 para migrar completamente al nuevo sistema. Esto incluye también mayores requisitos para compras por internet, como códigos dinámicos o segundos factores de verificación, y procesos más seguros para afiliar tarjetas a billeteras digitales.
Según la Resolución SBS N.º 2286-2024, las instituciones financieras también deberán implementar tecnologías como la tokenización, que protege los datos de las tarjetas al reemplazarlos por identificadores únicos. Este cambio será obligatorio al comprar en plataformas de terceros, lo que incrementará la protección del consumidor ante posibles ciberataques.
Para los usuarios, el cambio más inmediato será la necesidad de activar su PIN al recibir una nueva tarjeta bancaria. La SBS recomienda mantenerse informado sobre las políticas de su banco o caja y evitar compartir su clave secreta para reforzar la seguridad en sus operaciones financieras.