El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, anuncia que convocará una marcha hacia el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) si se mantienen las supuestas trabas políticas al proyecto del tren Lima–Chosica. Asegura que la obra “va de todas maneras” y que una marcha blanca está prevista para julio como parte de su implementación.
Durante su pronunciamiento, López Aliaga advierte que tomará una respuesta política directa si el Ejecutivo interfiere con el proyecto por motivos partidarios. Afirma que la propuesta cuenta con respaldo ciudadano y que representa una solución clave para la conectividad y desarrollo urbano de la capital.
El alcalde sostiene que la movilización busca dejar en claro que “el pueblo sí quiere tren, sí quiere libertad y sí quiere progreso”, y que no permitirá que decisiones ajenas a criterios técnicos frenen la ejecución. Anuncia que convocará a miles de ciudadanos si no se respeta el cronograma y la voluntad de la ciudad.
Finalmente, critica cualquier intento de retrasar el proyecto ferroviario por razones políticas, y reafirma que defenderá el avance del tren como una obra estratégica. La marcha blanca programada para julio marcará, según dice, el inicio simbólico del funcionamiento de la nueva infraestructura de transporte.