Enrique Carbonel, padre de uno de los 13 mineros asesinados en Pataz, expresó entre lágrimas y rabia su indignación contra el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén Olaya, por haber cuestionado la veracidad de la denuncia del secuestro. “Eso es una gran mentira, y que lo sepa todo el país”, dijo, tras afirmar que el caso fue reportado oficialmente desde el martes 29 de abril por la noche.
“Usted es un patán, un desgraciado”, exclamó frente a cámaras de Canal N, en un mensaje directo al premier, a quien acusó de minimizar el dolor de las familias. También exigió su renuncia inmediata por haber mentido sobre los tiempos de respuesta del Ejecutivo.
Carbonel criticó duramente la ausencia del Estado en la zona minera de La Libertad y reclamó la instalación urgente de una base militar para frenar la violencia. “No hay ni un puesto policial, ni un punto de auxilio rápido. ¡Que el Estado caiga con todo su peso en esta zona!”, expresó.
Josue, su hijo, es una de las víctimas mortales de esta tragedia. La familia, junto a decenas de allegados, clama por justicia y acciones concretas ante lo que consideran abandono y negligencia por parte del gobierno.