La Cuarta Fiscalía Superior Anticorrupción logró que se confirme en segunda instancia la condena contra José Luis Gil Becerra, exdirector de la Dirección General de Inteligencia (Digimin) del Ministerio del Interior, por el delito de peculado por utilización. El fallo ratifica que el exfuncionario usó irregularmente a dos suboficiales de la Policía Nacional para actividades privadas, alejadas de sus funciones oficiales.
Según la investigación fiscal, en lugar de emplear a los agentes policiales en tareas de inteligencia, Gil Becerra los destinó a cumplir labores personales para su entorno familiar. Los policías actuaron como choferes y asistentes de su esposa, su hijo menor y la trabajadora del hogar, bajo una supuesta necesidad de seguridad, que no pudo ser justificada.
La sentencia impuesta fue de cuatro años de prisión efectiva, conmutada por 206 jornadas de servicios comunitarios. Además, se estableció una inhabilitación por seis meses para ocupar cargos públicos, el pago de una reparación civil de S/ 5,000 y una multa equivalente a 180 días. La defensa del acusado intentó revertir la decisión, pero fue rechazada por la Segunda Sala Penal de Apelaciones de Lima.
Este caso se suma a una serie de procesos impulsados por el Ministerio Público para enfrentar el uso indebido de recursos del Estado por parte de funcionarios. La Fiscalía reafirmó su compromiso con la lucha contra la corrupción, subrayando que este tipo de prácticas socavan la confianza ciudadana y afectan directamente a los intereses públicos.