MADRID 9 Abr. (EUROPA PRESS) –
Las autoridades de la Franja de Gaza han alertado este miércoles de que 60.000 niños palestinos corren el riesgo de sufrir “graves complicaciones” de salud a causa de la desnutrición, en medio del bloqueo israelí a la entrada de ayuda al enclave y ante la expansión de la ofensiva militar de Israel.
El Ministerio de Sanidad gazatí ha indicado en un comunicado publicado en su cuenta en Telegram que “el cierre de los cruces para el paso de alimentos y suministros médicos podría incrementar el número de personas que sufren desnutrición”.
“La ausencia de una nutrición adecuada y agua potable aumentará los problemas sanitarios, a lo que se suma la continuada prohibición a las campañas de vacunación a los niños, especialmente contra la poliomielitis”, ha subrayado, ante la enorme crisis humanitaria en la Franja.
El comunicado ha sido publicado horas después de que el portavoz del Ministerio de Exteriores israelí, Oren Marmorstein, negara que haya “escasez de ayuda humanitaria” en Gaza y afirmara que durante los 42 días de alto el fuego, roto desde el pasado 18 de marzo cuando el Ejército israelí reanudó sus ataques contra el enclave palestino, entraron al enclave “más de 25.000 camiones” con suministros.
Marmorstein respondió así a unas declaraciones realizadas el martes por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, quien denunció que Gaza “es un campo de exterminio” y que “los civiles viven en un círculo vicioso de muerte”, al tiempo que incidió en que Israel tiene “obligaciones inequívocas” como “potencia ocupante” de “garantizar el abastecimiento” tanto alimentario como médico de la población gazatí.
Israel impuso un nuevo bloqueo a la entrada de ayuda humanitaria al enclave cerca de dos semanas antes de relanzar su ofensiva contra Gaza, rompiendo el alto el fuego alcanzado en enero con el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). Además, días antes del reinicio de las operaciones militares cortó igualmente el suministro eléctrico al territorio costero palestino.