Tras pasar a la clandestinidad el martes 3, la suspendida fiscal superior Elizabeth Peralta Santur se entregó a la justicia, la tarde del miércoles 4 de diciembre.
Vistiendo ropa y zapatillas deportivas, la funcionaria del Ministerio Público se apersonó hasta el despacho del Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria, para ponerse a derecho y cumplir los 18 meses de prisión preventiva impuesto por la Corte Suprema en la investigación que se le sigue por los delitos de tráfico de influencias y cohecho pasivo específico, en el marco del ‘Caso Chibolín’.
HORAS ANTES PERALTA SANTUR HABÍA PASADO A LA CLANDESTINIDAD
En declaraciones para RPP Noticias, el abogado Benji Espinoza, defensa de Peralta Santur, reveló que su patrocinada había tomado la decisión de pasar a la clandestinidad luego que la Corte Suprema le revocara la orden de comparecencia con restricciones por prisión preventiva.
“La doctora Peralta Santur va a ejercer su derecho a resistir una detención que considera arbitraria hasta que se agoten los mecanismos legales para poder cuestionar la misma”, dijo el martes a RPP. También precisó que se encontraban evaluando interponer un habeas corpus para revertir la medida.
“Ella ha manifestado juntamente con el equipo de la defensa la voluntad, y aunque la decisión sea equivocada, respetarla y ponerse a derecho. (Se encuentra) insatisfecha, porque nosotros esperábamos que se pueda seguir la línea jurisprudencial de la propia Corte Suprema, del Tribunal Constitucional (…) ya la historia del derecho juzgará a quienes decidieron y cómo lo hicieron”, precisó.
Como se recuerda Peralta Santur está vinculada a una presunta red de corrupción junto al empresario Javier Miu Lei y el presentador de televisión, actualmente encarcelado en el penal de Lurigancho Andrés Hurtado conocido como ‘Chibolín’. A la magistrada se le acusa de ofrecer sus influencias para gestionar la devolución de oro incautado a Miu Lei, a cambio de un millón de dólares, así como de recibir 80,000 dólares para intervenir en una investigación por lavado de activos contra Paltarumi, competencia del empresario.