MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) –
El presidente israelí, Isaac Herzog, se ha reunido este jueves con familiares de beduinos tomados como rehenes por Hamás durante su incursión terrestre en Israel a comienzos de mes y ha aseverado que el conflicto desatado en Oriente Próximo “no es una guerra entre judíos y musulmanes”.
“Esto no es una guerra entre judíos y musulmanes. Esta es una guerra entre la gente que busca traer luz y la gente que busca traer oscuridad”, ha manifestado el jefe de Estado Israelí desde la ciudad de Rahat, ubicada a escasos 25 kilómetros de la frontera con el noreste de la Franja de Gaza.
Tras su reunión con los familiares de los rehenes beduinos –árabes nómadas que habitan en Oriente Próximo–, Herzog ha asegurado que comparte “el dolor de toda la población árabe israelí y de la sociedad beduina en particular”, según informaciones recogidas por ‘The Times of Israel’.
“Es importante para mí decirle a toda la sociedad árabe en Israel cuánto aprecio la responsabilidad mostrada por esta comunidad en estos días difíciles. Pero debemos recordar que esta no es una lucha política”, ha zanjado Herzog, que apunta a una lucha entre un Oriente Próximo de paz o de “derramamiento de sangre y guerra”.
Hamás lanzó a comienzos de mes un ataque sin precedentes contra Israel, dejando un balance de más de 1.400 muertos y tomando como rehenes a más de 200 personas, algunas de ellas extranjeras. Israel lanzó respondió poco después con una contraofensiva contra la Franja de Gaza que deja ya más de 7.000 palestinos muertos.