Hoy, 27 de septiembre, se celebra el Día Mundial del Turismo. Esta fecha nos hace reflexionar sobre cuál es la situación del sector en el país y qué se puede hacer para recuperar los números previos a la pandemia.
Entre el 2018 y 2019, Perú recibía, como promedio, 4.5 millones de turistas al año. Estas cifras, al igual que todos los países del mundo cayeron debido a las restricciones que los Gobiernos adoptaron para evitar contagios por el Covid.
En el 2022, cuando se relajaron las restricciones, al Perú llegaron dos millones de turistas. Es decir, menos del 50% de las cifras prepandemia.
Y este año, según informe ComexPerú, con cifras del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo del Perú (Mincetur), entre enero y agosto arribaron 1.6 millones de extranjeros, es decir 47.3% menos que en la época prepandemia.
Se esperaba que para el 2023, el número de visitantes se incremente entre un 10% y 20%, respecto al año anterior. Esto no se ha cumplido debido a las protestas sociales de comienzo de año, la inseguridad ciudadana, los efectos del Fenómeno del Niño, el ciclón Yaku, la epidemia del dengue y por último la crisis migratoria en la frontera sur.
Todos estos factores afectaron la imagen del Perú, al punto que varios países, sobre todo de Europa y Estados Unidos, pusieron al país en la lista negra y advirtieron a sus turistas a no visitar el país.
De enero a junio, se registró la llegada de un millón de turistas. Y a pesar de que julio y agosto, son meses de la temporada de vacaciones en el hemisferio norte, la proyección señala que en el segundo semestre llegaremos, con suerte, a un millón más de turistas.
Turismo como fuente de ingreso
No hay duda que el turismo también es una buena fuente de ingreso para el país. La actividad turística puede ser una fuente de grandes ingresos económicos, además de la creación de empleo y además ayuda a mejorar la imagen del país. Pero para lograr una buena reactivación se necesita a tres actores clave: el Estado, el sector privado y la sociedad.
En los últimos años, el presupuesto del Estado, destinado a la promoción del país, se ha reducido a menos de la mitad. Esto a pesar de que, en el último año, se realizaron campañas para promover al Perú como locación para la filmación de películas taquilleras a nivel mundial. La saga Transformers fue una de ellas y grabó diversas escenas en Cusco y el Machu Picchu.
Para Otto Regalado Pezúa de ESAN, “deberíamos aprovechar más las buenas noticias y reconocimientos del país, que están rebotando en todo el mundo”.
Con esta película se promocionó Cusco y el Santuario de Machu Picchu, declarado en el 2007 una de las Siete Maravillas del Mundo. Miles de personas alrededor del mundo, incluido a muchos peruanos, sueñan con visitar esta ciudadela de construcción inca.
Regalado Pezúa advierte: “A pesar de las campañas de promoción, todavía existe una falta de confianza por la inseguridad y brechas en conectividad”.
Hace unas semanas, Juan Carlos Mathews, el ministro de Comercio Exterior y Turismo, admitió que el comienzo del 2023 fue “bastante difícil” pero se mostró optimismo que en el 2024 será el año que se reactive el turismo en el país.
En ese sentido, se busca impulsar tres segmentos de turismo: el turismo de reuniones, el turismo de filmaciones y el turismo de nómades digitales.
En el 2024, el Perú será sede, por tercera vez, del Foro Económico de Asia y el Pacífico (APEC). En el 2025, anfitrión el foro de la Organización Mundial del Turismo (OMT) y en el 2026 será sede de un congreso mundial de minería. “Tres mega eventos que van a poner al Perú en los reflectores”, dijo con confianza Mathews.