La ex viceministra de Transportes, Fabiola Caballero, denunció que entre las irregularidades que observó durante su trabajo en la gestión del exministro Juan Silva estuvo la suspendida concesión del mantenimiento de la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica.
Por cierto, el consorcio único que estuvo a punto de hacerse de la licitación, conformado por Gilat y Optical Networks, acaba de emitir un comunicado en el que niega que el trámite se hubiera direccionado.
Caballero le advirtió a Silva que, tras la concesión manejada por la empresa Azteca y un modelo tarifario que hacía poco competitivo el esquema al punto que no se he llegado a usar el 3% de capacidad de la red para dotar de internet al Estado, se encargó el desarrollo de tres modelos para administrar la red de manera transitoria, mientras se elaboraba un nuevo modelo de negocio que hiciera la red efectiva y rentable.
De esos tres escenarios, el menos deficitario para el del Estado era que la red sea temporalmente administrada por Pronatel (Programa Nacional de Telecomunicaciones), que era una posibilidad permitida para situaciones excepcionales en la ley de Asociaciones Público- Privadas (APP).
A pesar de la insistencia de Silva evidenciada por los chats de whatsapp revelados por los medios de comunicación, Caballero se impuso en febrero último y la licitación se detuvo.
Caballero confirmó que “detuve un proceso en el Programa Nacional de Telecomunicaciones, que pretendía sin mucha transparencia otorgar el mantenimiento de la red dorsal de fibra óptica favoreciendo a una empresa. Es así, que no se adjudicó dicho contrato. Recomendé al director ejecutivo de Pronatel que la propia institución asumiera la ejecución de su mantenimiento de manera temporal y que revisara el modelo de la red dorsal tal como se había llevado en los últimos años.
Mi capacidad técnica me indicó que no debíamos sacar adelante dicho proceso, ni dicho contrato, y actuar con absoluta transparencia en los procesos de contrataciones. El resultado fue la destitución, sin mi conocimiento, del director ejecutivo de Pronatel que había defendido la transparencia del proceso”.
Ese director era Jorge Túpac Yupanqui, quien el último domingo declaró en el programa Cuarto Poder que, en una reunión en la casa del exministro Silva, se encontró con un personaje que le llamó la atención:
“—¿Conoce al señor Fermín Silva?
Jorge Túpac Yupanqui, exdirector de Pronatel: Sí, sí lo conozco. Un día estábamos en la casa del ministro y me lo presentó. No hablamos de negocios, nunca más lo volví a ver.
—¿Fermín Silva estaba en la casa del ministro?
Jorge Túpac Yupanqui, exdirector de Pronatel: Sí.
—¿Y cómo se lo presentó?
Jorge Túpac Yupanqui, exdirector de Pronatel: Me lo presentó como su primo y me dijo que era dueño de la Clínica La Luz”.
El dueño de la clínica La Luz es chotano, como el presidente Pedro Castillo. Y, como lo dio a conocer CARETAS, según el registro de visitas de Palacio de Gobierno, llegó pasada la medianoche del 8 de septiembre para a reunirse con el presidente Pedro Castillo. De acuerdo con el registro de entradas a Palacio de Gobierno, ingresó a las 00:01 y se retiró a las 00:57 a.m.
Pero una semana antes, el 1 de setiembre, Silva Cayatopa ya había ingresado a Palacio para mantener una reunión de trabajo con Irma Rojas Regalado, directora de la Oficina de Apoyo al Cónyuge del Presidente de la República. En otras palabras, el despacho de la primera dama, Lilia Paredes.
