Dentro de la larga carrera política del flamante presidente del Consejo de Ministros, Héctor Valer Pinto, se destaca su paso por el Partido Aprista Peruano. Cuando militaba en la agrupación fundada por Víctor Raúl Haya de la Torre, el congresista de Perú Democrático buscó debilitar la representación de las comunidades indígenas.
En noviembre de 2009, el aprista Valer, entonces funcionario del Instituto para el Desarrollo de los Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos (INDEPA), y el excongresista Mauricio Mulder, promovieron la creación de la Confederación Nacional Agraria, Campesina y Nativa (CONAC). Esta institución tenía como objetivo desplazar a la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP).
En el documento se buscaba rechazar la campaña de desprestigio iniciada contra el gobierno del expresidente Alan García ante organismos internacionales, emprendida por organizaciones no gubernamentales como Survival y AIDESEP. Estas acciones fueron calificadas de calumniosas por la contraparte alanista.
Adicionalmente, Valer buscaba que CONAC se creara con el fin de responsabilizar a AIDESEP por invocar a una “insurgencia popular” (…), so pretexto de apoyar a los derechos nativos”, y que “generó una masacre horrorosa entre peruanos”, en referencia al “Baguazo”.

Además, la propuesta de Valer también señalaba que era necesario que el CONAC “fije una posición firme” frente a la ley de Comunidades Indígenas que se discutía en el Congreso y advertía que había tergiversación de conceptos como tierra y territorio, suelo y tierras, comunidad campesina y comunidad indígena, entre otros.
El 5 de diciembre de 2009, no obstante, la propuesta de Valer no tuvo éxito. Esto porque la primera asamblea de la CONAC contó con tan solo 40 militantes del APRA. La mayoría eran caras conocidas de personas que viven en Lima pero representaban a Cusco, Apurímac y La Libertad. Se esperaba la presencia de representantes nativos de las 26 regiones del Perú.