Desde primeras horas de la madrugada la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios, junto a efectivos policiales, viene llevando a cabo una serie de allanamientos y detenciones en Ayacucho y Lima en el denominado operativo contra la presunta organización criminal denominada “Los inversionistas del Bicentenario”.
El operativo se realiza bajo la supervisión del fiscal superior coordinador nacional anticorrupción, Omar Tello Rosales, y con el apoyo de agentes de la Policía Nacional del Perú.
Por el momento se conoce que son 29 las viviendas intervenidas y hay 12 implicados por el delito de colusión agravada y cohecho en agravio de municipios de Ayacucho. Entre los detenidos se encuentra el excongresista de Fuerza Popular Víctor Albrecht.

En el allanamiento a la vivienda del ex congresista fujimorista se da al estar implicado dentro de las investigaciones por sus presuntas conexiones con funcionarios del municipio de Ayacucho.
Cuando la policía intentaba detener al ex congresista, este sufrió una descompensación en su salud y fue trasladado a un nosocomio. Minutos después fue visto ingresar al hospital Arzobispo Loayza donde se realizó la prueba de descarte del Covid-19. En estos momentos, se encuentra en la sede de Medicina Legal
Asimismo, se encuentran con detención preliminar Juan Borda Ávalos, alcalde de Anchaguay; Vladimir Carhuapoma Yance, hermano del actual presidente de EsSalud Mario Carhuapoma; y Angélica Barturén Núñez, quienes formarían parte de una presunta organización criminal.
Caso Rich Port II
Como se recuerda, el 25 de enero 2020, el excongresista Víctor Albrecht fue detenido por la Policía Nacional luego de que el Ministerio Público lo investigara por formar parte de una organización criminal en el caso Rich Port II.
En ese entonces, la Fiscalía acusó a Víctor Albrecht junto a Juan Sotomayor de extorsión en perjuicio de la Empresa de Servicios de Limpieza Pública del Callao (Eslimp).
La hipótesis fiscal señalaba que el ex alcalde del Callao junto al ex congresista de Fuerza Popular serían los presuntos cabecillas de la organización que se apropió de los recursos de Eslimp a través de la contratación de trabajadores ‘fantasma’.