Daniel Mora, exministro de Defensa, exparlamentario y uno de los fundadores del Partido Morado dio detalles acerca de la denuncia por violencia familiar, interpuesta por su esposa Lilia Jaureguy, señalando que trató de defenderse ante un ataque de ira provocado por la presunta ludopatía de su esposa.
“El tema surgió en ese momento por algo trivial. Discutimos porque les dije a mis nietos que estaban jugando con agua dentro de la casa, se vayan a la terraza. En esa discusión, ella se puso violenta y le dije ‘bueno, como no estás jugando te pones así’. Ella comenzó a tratar de agredirme y yo volví a mi dormitorio. Cerré la puerta y ella empujó la puerta. Yo le agarré de los brazos y en ese forcejeo ella cae a la cama del dormitorio. Supongo que se resbala al suelo y yo aprovecho esa oportunidad para salir”, relató Mora en una entrevista con Hildebrandt en sus Trece.
“También hay mujeres violentas. Yo lo único que hice fue tratar de defenderme. No se analiza el problema que sucede en muchos lugares: el de la adicción y la salud mental en las familias. Yo no quería hacer una declaración porque esto afecta a mis hijos y nietos que ya están grandes”, agregó.
El aún candidato al Parlamento es seriamente cuestionado por la denuncia interpuesta por su esposa por violencia familiar en marzo de 2019, lo que a la larga provocó su renuncia a la candidatura (que aún no hace formalmente pero lo anunció) y al partido político que fundó.
“Por qué lo voy a decir si soy una persona digna. Sería una suerte para el Perú que voten por mí. Desgraciadamente, pasó todo esto”, señaló Mora en una entrevista a Hildebrandt en sus Trece.
Liliana Jaureguy se ratificó en su denuncia
La esposa de Daniel Mora, en sus últimas declaraciones, reafirmó el hecho de violencia familiar que provocó la denuncia contra el exparlamentario. “No busco hacerle daño a nadie, pero estoy en mi derecho de declarar que todo lo que dije en mi manifiesto, es verdad”, señaló Jaureguy.
La señora Jaureguy también señaló que el proceso inició de manera célere, pero poco a poco se fue enfriando hasta que decidió no continuar con la denuncia, pues esta no se movía en el Poder Judicial.