Los ascensos en las Fuerzas Armadas (FF. AA) son investigados por la Fiscalía de la Nación y la Comisión de Fiscalización y Contraloría del Congreso por el presunto intento del presidente de la República, Pedro Castillo, de interferir en el proceso.
La interferencia no se habría concretado y se habrían respetado las propuestas de los comandantes generales de del Ejército, Marina de Guerra y Fuerza Aérea. Al menos, ese fue el sentido de las declaraciones del exministro de Defensa, Walter Ayala, y del ex comandante general EP, José Vizcarra.
Uno de los ascendidos fue el entonces mayor Cristian Saul Jaime Torres, quien mediante resolución 0594-2021-DE, pasó a teniente coronel. El documento está firmado por Ayala Gonzáles y Vizcarra Álvarez.
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Jaime Torres y el entonces teniente coronel Hugo Paul Herrera Cabana, integrantes del comité de selección del proceso de licitación para contratar suministros de alimentos para topas de la zona del Vraem, en Ayacucho en el 2019, habrían falsificado la firma del tercer miembro del grupo seleccionador, mayor Hugo Conza Delgado, para favorecer a la empresa “Corporación Alimenticia San Antonio de Padua SAC”, pese a que no contaba con los requisitos necesarios para hacerse de la buena pro.
En consecuencia, Jaime Torres (jefe del órgano encargado de las contrataciones), Herrera Cabana, la capitana Guisela Sánchez Polanco (jefa de almacén) y Edgar Casaverde Roca fueron acusados de colusión por, supuestamente, haber concertado para defraudar al Ejército por S/ 1, 339, 920.
El abogado Walter Chinchay cuestionó en diálogo con esta publicación de que, pese a que la denuncia data del 2020, no fue impedimento para que Cristian Jaime Torres fuera ascendido el 14 de octubre del año pasado.
