Una denuncia mal registrada por la suboficial de primera PNP, Jahayra Martínez Cerna, de la delegación de Pueblo Libre, ha provocado que una pareja de esposos enfrenten un viacrucis para no perder el automóvil que compraron en 2008. Esta historia comienza el 21 de septiembre de 2020 cuando Carmela Rodríguez Llave, una mujer que en aquel momento tenía 81 años, acude a la delegación de Pueblo Libre a presentar una denuncia porque supuestamente su vehículo había sido robado de su cochera.
En ese momento, la suboficial Martínez Cerna tomó la denuncia de la octogenaria Rodríguez Llave quien registró como propietaria el automóvil de marca Toyota Yaris de placa CQO-375. Sin embargo, según los registros de la Superintendencia Nacional de los Registros Públicos, esa placa está inscrita a nombre de Patricia Noriega Arnaez y Alfredo Delgado Negrón, quienes hoy temen perder su vehículo. Al parecer, al momento de digitar la placa del auto se produjo un error, que ha ocasionado más de una molestia.
Apenas hace dos semanas atrás esta pareja llegó a enterarse de esta denuncia policial por una casualidad. Ellos acudieron a la comisaría donde se realizó la denuncia pero no obtuvieron respuesta. Días después, desesperados llegaron hasta la vivienda de la señora que denunció el robo del vehículo, pero no la encuentran. No obstante, lograron conversar con su hijo, Carlos Grajeda Rodríguez, quien les comenta que “la mujer tendría demencia senil”. Además, Grajeda reveló que el auto “desaparecido” es de su propiedad, y cuenta con dos detalles que la policía no corroboró en su momento. El color y una ligera diferencia en la placa: CQG-375. Mientras que el de la pareja es CQO-375.
“Luego de nuestra investigación, encontramos que la denunciante tiene un hijo llamado Carlos Grajeda Rodríguez, el cual tiene un Toyota Yaris con placa CQG-375, color azul metálico que estaciona en la casa de su madre. Dichas placas se parecen pero no son las mismas, la marca y modelo son iguales, sin embargo, el color es diferente y la policía debió revisar lo que esta señora estaba denunciando”, señala la pareja.

Más grande fue la sorpresa cuando la pareja pudo comprobar que “el auto que supuestamente había sido hurtado, se encontraba en la cochera de la casa de la señora”. Nada de esto hubiera ocurrido si la suboficial Martínez hubiera corroborado en la Sunarp que el vehículo no le pertenecía a la señora.

Este viernes, Alfredo Delgado acudirá hasta la División de Investigación de Robo de Vehículos de la PNP, con la esperanza de esclarecer este mal entendido.