Este sábado en la mañana, la Dirección de Investigación Criminal de la Policía Nacional (Dirincri) esperaba a Gabriela Sevilla Torello para que rinda su manifestación sobre lo que ocurrido el miércoles 19 de octubre.
Ese día, se hizo viral un anuncio en las redes sociales de la desaparición de una mujer, en trabajo de parto, que abordó un taxi en Surco para dirigirse a una clínica en San Borja.
El misterio tuvo en vilo a todo el país. Gabriela Sevilla apareció 36 horas después pero el paradero del bebé es una incógnita. En realidad, la discución de que si estaba o no embarazada es lo que captó la atención de los peruanos.
A las horas de su aparición, el ministro del Interior, Willy Huerta, acudió al Hospital Militar a donde había sido trasladada y al salir dio declaraciones a la prensa diciendo que de acuerdo al informe del médico legista la joven no estaba embarazada ni presentaba signos de parto reciente ni antiguo.
A pesar de eso, Gabriela Sevilla asegura que sí estaba embarazada y que tiene pruebas para demostrarlo y que iniciará la búsqueda de su bebé.
Las horas que estuvo en el Hospital Militar se le hicieron una serie de exámenes, pero esto no se completaron porque Gabriela Sevilla dijo sentirse cansada y que prefería hacerlos al día siguiente.
“Vinieron a hacerme exámenes y le dije que yo ya no me quería hacer porque me hicieron un montón. Salen a decir ‘ella se negó a hacerse los exámenes’ y es verdad, llegó un momento en que dije: ‘Ya no me los quiero hacer sino mañana’. Yo no me niego a que me hagan las pruebas”,
Sevilla Torello debía presentarse este sábado en la Dirincri pero no acudió. Los que sí fueron a la citación y dieron sus descargos fueron Ramiro Gálvez, su pareja, y sus padres.