La Fiscalía General de la República (FGR) solicitó esta tarde a la Interpol la ficha roja para la búsqueda y captura internacional de la peruana Laura Bozzo Rotondo, conductora de televisión, luego de que un juez federal ordenara su aprehensión por el presunto delito de evasión fiscal.
Como se recuerda, Bozzo Rotondo condujo el programa de televisión “Laura en América”, entre los años 1998 y 2008, el cual fue duramente criticado en diversas ocasiones por la ridiculización, violencia e insultos hacia los participantes. En aquel programa, la también abogada atendía casos de violencia familiar, adulterio y adicciones.
En 2002, el juez Saúl Peña Farfán denunció a la conductora de televisión por asociación ilícita para delinquir y peculado, acusándola de recibir la suma de 10 mil dólares mensuales de manos del exasesor presidencial y exjefe del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN) Vladimiro Montesinos, recluido hoy en la Base Naval del Callao.
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Por ese motivo, Bozzo Rotondo fue arrestada el 17 de julio de 2002 en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez cuando estaba a punto de abandonar el país en un avión con destino a la ciudad de Miami a razón de una orden de impedimento de salida del país y de arresto domiciliario. Luego, el Poder Judicial ordenó mandato de comparecencia con restricción de detención domiciliaria. Ante ello, Bozzo declaró como domicilio legal el estudio de televisión desde el que grababa a diario su programa en versión para el extranjero. Bozzo permaneció en los estudios del canal Monitor ubicado en el distrito de San Borja hasta el 15 de junio de 2005, día en el que fue liberada.
El pasado 11 de agosto, Laura Bozzo debió haber atendido una audiencia, pero no se presentó. Por esa razón, la justicia mexicana resolvió vincularla al proceso y se le dio un plazo de 48 horas para que se entregue voluntariamente en el penal de Santiaguito, Estado de México. El periodo de espera venció el 13 de agosto, por lo tanto, el juez ordenó su aprehensión. Según informaron medios nacionales mexicanos, la conductora cometió un delito fiscal que sobrepasa los 12 millones de pesos, unos 602 mil dólares por la venta de un inmueble que había sido embargado previamente por el Servicio de Administración Tributaria de México (SAT), y al comercializarlo incurrió en el delito de “depositario infiel” por el que podría ser condenada de tres a nueve años de prisión. Sin embargo, este no sería el primer conflicto que Laura Bozzo tiene con el SAT mexicano, ya que en 2018 fue acusada de evasión fiscal por un monto de 17 millones de pesos, es decir unos 853 mil dólares. Al no haber pagado el Impuesto Empresarial Tasa Única (IETU) que data de 2012. En ese entonces, Bozzo Rotondo excuso su error, al asegurar ser “muy bruta para los impuestos” y que se trataba de un mal manejo de alguno de sus contadores.
Por su parte, la conductora de televisión Laura Bozzo brindó declaraciones a ATV Noticias Edición Central tras permanecer oculta. “No, no sé de dónde salen todas estas cosas, yo de ese tema ya no hablo, para eso están mis abogados, los que hablan son ellos, punto. ¡Yo no tengo nada que hablar!”, declaró desde la clandestinidad. Al parecer está vez, la suerte para la abogada de los pobres estaría echada.
