Viller Flores Huilca, de 48 años, siempre está presto a apoyar a las demás áreas naturales protegidas cada vez que lo necesitan a cuenta de sus conocimientos, por su diálogo con las comunidades, ordenamiento de actividades y control de incendios forestales.
Después de un gran incendio en los alrededores de la ciudadela de Machu Picchu en 1997, donde participó como bombero voluntario, entendió la importancia de hacer capacitaciones. En estos últimos 23 años esta ha sido una de sus principales misiones y hasta el momento es responsable de la formación de más de 750 brigadistas a nivel nacional. “Ahora se tiene la capacidad de sofocar un incendio de manera técnica”, señala. “Al comienzo nadie sabía nada”.

Además, su labor ha sido fundamental en los momentos más críticos. Participó como rescatista y evaluador de riesgos en el terremoto de 2001 en la Reserva Nacional de Paracas, Ica, así como líder para el control de los incendios forestales en el país, incluso fuera de áreas naturales protegidas y emergencias internacionales, como el dantesco incendio del año 2017 en Chile.
Viller Flores es un apasionado del Perú y uno de los héroes de la conservación, cuya experiencia y dedicación lo hicieron merecedor del cargo de presidente de la Asociación de Guardaparques del Perú durante el periodo 2015-2016, renovando con más fuerza su compromiso en defensa y mejora de sus pares.